En el Tolima están pasando cosas buenas. Los números no mienten: según el DANE, el departamento registró un crecimiento del 2,6 % en 2024, superando el promedio nacional y consolidándose como una de las regiones con mejor desempeño económico del país.
El día del atentado a Miguel Uribe yo también estaba en urgencias. A pocos metros, entraban al joven que disparó, escoltado y a toda velocidad. Lo que viví ese día aún me retumba en el pecho.
Es claro que en la vida pública y especialmente en los escenarios políticos es necesario controvertir, refutar, argumentar, pero lo que nunca será necesario es utilizar el lenguaje para aniquilar, al contrario. Las balas matan, pero las palabras como balas también matan.
Mejoras en salud, educación e innovación reflejan un camino firme hacia la competitividad. El campo sigue siendo motor de desarrollo y el reto es claro: no perder el rumbo.
Colombia no puede seguir el camino de la esclavitud moderna que nos ha dejado el “cambio”. Esa que estrangula al empresario, desincentiva la inversión, vulnera las instituciones, estigmatiza la prensa y promueve odio y resentimiento.
¿De qué sirve inaugurar una obra millonaria si no funciona? Esa es la pregunta que muchos ibaguereños nos hacemos ante el fallido estreno del acueducto alterno, una mega obra que prometía liberarnos de los constantes cortes de agua y la dependencia exclusiva del río Combeima.
¡Lo volvió a hacer! El representante a la Cámara, Gerardo Yepes hace méritos para obtener el título de indisciplinado del año al interior del partido Conservador.
¿Cómo es posible que, a pesar de contar con presupuestos, políticas y documentos que advierten sobre la importancia de tomar medidas, aún no tengamos campañas bien estructuradas para reducir el consumo de agua?
Hemos sido engañados, por altos estamentos nacionales quienes desconocen y pretenden minimizar las grandes falencias de este “antisistema de salud” fundamentado sobre la intermediación financiera.