Falleció Clemencia Puentes de Rivas: pionera de la caficultura en el sur del Tolima
El municipio de Ataco y el sur del Tolima están de luto tras el fallecimiento de Clemencia Puentes de Rivas, una reconocida caficultora que dedicó toda su vida al cultivo del café, dejando una huella indeleble en la región. Clemencia, quien tenía 76 años, era una figura emblemática en la caficultura del sur del departamento, conocida por su arduo trabajo y su amor por la tierra que cultivó con esmero durante décadas.
El trágico accidente que le costó la vida ocurrió mientras se dirigía a la ciudad de Neiva, Huila. Clemencia viajaba por una vía terciaria que conecta con el centro poblado de Santiago Pérez, y posteriormente se dirigía hacia Neiva para realizar algunos trámites. Lamentablemente, en la vereda Cascarillo, en la ruta que lleva de Santiago Pérez a la base militar de Casaverde, el vehículo en el que se desplazaba perdió el control al esquivar un hueco, precipitando la camioneta por un abismo.
En el accidente, Clemencia perdió la vida, mientras que otras dos personas, colaboradores en su finca Montefrío resultaron heridas y fueron trasladadas al centro de salud de Santiago Pérez. Una de ellas ya fue dada de alta, y la otra fue remitida a un hospital en Ibagué para recibir atención especializada.
Clemencia Puentes de Rivas era más que una caficultora; era una madre y esposa dedicada, conocida por su gran corazón y compromiso con su familia y su comunidad. Junto a su esposo, Don Héctor Rivas, Clemencia administraba la finca Montefrío, una de las más grandes y productivas del sur del Tolima, un lugar que no solo aportaba a la economía caficultora de la región, sino que también generaba numerosos empleos directos e indirectos.
La finca Montefrío, es una referencia emblemática en la zona, siendo una de las primeras fincas fundadas en este sector del departamento. Clemencia nunca quiso abandonar su finca, prefiriendo dedicar todo su tiempo a su tierra y a su núcleo familiar. Su vida fue un ejemplo de dedicación y amor por la caficultura, dejando tras de sí un legado que será recordado por todos aquellos que la conocieron.
Clemencia deja tres hijos, quienes ahora deberán continuar con el legado que su madre construyó con tanto esfuerzo. Aunque aún no se ha confirmado oficialmente, se espera que sus honras fúnebres se realicen en la ciudad de Neiva, donde parte de su familia reside. Su partida deja un vacío profundo en la comunidad, que siempre la recordará como una de las grandes pioneras de la caficultura en el sur del Tolima.