Santiago Guifo, el joven ibaguereño que abandonó la universidad para emprender con un negocio de hamburguesas

Según cifras del Ministerio de Salud, en Colombia murieron aproximadamente 143.301 personas por causa de la pandemia generada por el COVID-19. Sin duda, una cifra demasiado alta y que obligaría a la mayoría de las personas a querer olvidar por completo aquellos tiempos amargos y difíciles de la vida, en los que perdieron a sus seres queridos, así como recursos económicos, empresas, matrimonios, entre muchos otros.
Todo lo contrario, le pasó a Santiago Guifo Duque, un joven ibaguereño que, a comienzos de 2021 y en plena época dura del virus, decidió aventurarse a preparar en la cocina de su apartamento, en principio, 10 hamburguesas para vender sobre pedido a sus conocidos. Posteriormente, y luego de cuatro años de mucho trabajo, logró tener dos puntos físicos en la ciudad: uno en el barrio Belén, diagonal al Museo de Arte del Tolima, y otro en el barrio La Campiña, donde vende hamburguesas y perros calientes. Gracias a su esfuerzo, ha logrado generar buenas ganancias y, desde luego, empleo para varias personas de la capital tolimense.

Y es que Santiago todo se imaginó, menos que su emprendimiento crecería tanto, al punto de decidir abandonar sus estudios en Ingeniería en Agroecología en la Universidad del Tolima para dedicarse por completo a lo que lo apasiona: su negocio. En esta travesía ha contado con el apoyo fundamental de sus padres, familiares y amigos cercanos.
“Yo siempre había estado acostumbrado a tener mi propio dinero, y en la pandemia no había trabajo. Como había vivido en Medellín, allá cocinaba y era consciente de que me quedaban buenas las hamburguesas, entonces de ahí nació la idea”, afirmó Santiago.
Según él, el atractivo de “Guifos”, como es el nombre de su marca en honor a su apellido paterno, son las hamburguesas y perros gourmet, dentro de los cuales se destacan las hamburguesas mixtas de pollo y carne, las de chicharrón con panceta de cerdo y las que, en lugar de pan, llevan plátano verde. Para Santiago, el concepto de su comida no es “comida rápida”, pues todo lo que vende requiere mucho tiempo de preparación y lo realiza desde cero, como las salsas de la casa —de piña, jalapeño y ajo—, las papas a la francesa y las bebidas de todo tipo, entre ellas las sodificadas de sabores.
A sus 23 años, además de ser un empresario exitoso, Santiago alterna el trabajo de su negocio, que abre todos los días a excepción de los martes, con el deporte. Este joven ha practicado boxeo, muay thai —del cual fue campeón nacional dos veces en categoría amateur— y jiu-jitsu. Según su testimonio, todo ello le ha aportado disciplina, le ha enseñado a estar enfocado y a tener confianza para salir adelante con su negocio. Asimismo, ha practicado artes marciales mixtas, en donde ha tenido tres victorias y cero derrotas.

“Sobre el tema académico, yo disfrutaba de las prácticas universitarias, pero sentí que era demasiada carga mental tener que estudiar y sacar adelante el negocio. Por ello opté por abandonar la carrera y trabajar aún más duro por mi marca”. Puntualiza.
En su concepto, uno de los factores diferenciales de “Guifos”, además del tiempo que le dedica a sus preparaciones, es la calidad de los ingredientes, así como la atención al cliente, pues quien visite alguno de los dos puntos, además de disfrutar de una excelente comida, puede pasar un rato agradable jugando un juego de mesa.

Hoy, Santiago Guifo representa el ejemplo de una nueva generación de jóvenes emprendedores que decidieron transformar la crisis en oportunidad, y la formación académica por el cumplimiento de un sueño. Su historia demuestra que con pasión, disciplina y trabajo constante es posible construir un futuro sólido, incluso en medio de la adversidad. Su meta ahora es seguir expandiendo su marca y consolidarse como una de las propuestas gastronómicas más destacadas del Tolima.