Los planes de la Alcaldía de Ibagué para utilizar los recursos destinados al fallido puente elevado de la calle 60 con carrera Quinta en otras obras podrían enfrentar la firme oposición del concejal César Franco, quien sigue defendiendo la necesidad de este proyecto.

Franco aclaró que hasta la fecha no hay nada radicado, ya que aún no han comenzado las sesiones ordinarias en el Concejo, pero reiteró que la obra de la 60, que no pudo ser entregada por el exalcalde Andrés Hurtado, debe llevarse a cabo.

"Yo soy de los que considera que el puente de la 60 debe continuar y ejecutarse, porque es un desarrollo para toda la ciudad de Ibagué", afirmó el cabildante.

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Además, Franco sugirió que muchas de las opiniones contrarias a la obra podrían estar motivadas por intereses personales, como los del sector comercial de la zona.

Para que la alcaldesa Johana Aranda pueda redirigir los recursos del puente hacia las obras en las vías del sector de El Salado, necesitará la aprobación del Concejo Municipal, lo que implica cambiar la destinación original de los fondos.

Es por eso que Franco insistió en que se deben presentar argumentos sólidos que demuestren por qué el proyecto no es viable o necesario.

"Si se llega a cambiar la decisión, tendrían que haber factores muy de peso para que sea así. Estoy muy ansioso de conocerlos. De lo contrario, sigo con la teoría de que el puente se tiene que desarrollar", concluyó.