En medio un operativo transnacional adelantado por el FBI de los Estados Unidos y la Policía colombiana, se logró en las últimas horas la captura de Juan Carlos Cuesta Córdoba, conocido dentro de la organización del Clan del Golfo como el 'Gordo Rufla', quien era considerado un narcotraficante de primer nivel.

Según informaron las autoridades, esta persona se dedicaba al acopio de la cocaína y a la ubicación de lanchas y medios de transporte marítimos, para poder enviar los narcóticos a los Estados Unidos, de tal manera que se le venía realizando un seguimiento e infiltración para lograr su captura.

Esta redacción pudo establecer que en contra de Juan Carlos se había emitido una orden de captura con fines de extradición solicitado por el distrito medio de La Florida, acusado del delito de narcotráfico y concierto para delinquir.

A través de las labores de inteligencia se conoció que este hombre permanentemente cambiaba de lugar de residencia para evitar el cerco de las autoridades, pero además practicaba ritos de santería y brujería con el objetivo de eludir las acciones de la fuerza pública.

De acuerdo con el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, en el trabajo investigativo se pudieron rastrear bienes por más de 80 mil millones de pesos, representados en droguerías, ferreterías, apartamentos, casas y vehículos, pero también en joyas que superaban los 100 millones de pesos cada una. Muchas de estas cadenas, pulseras y demás joyas se las regalaba a sus mujeres de confianza.

Así mismo, se conoció que el Gordo Rufla era muy cercano al máximo cabecilla del Clan del Golfo, alias Otoniel, con quien tenía permanente comunicación para coordinar el envío de los cargamentos de cocaína a los Estados Unidos.

La redacción judicial de Econoticias de Ecos del Combeima conoció a través de algunas fuentes, que este sujeto era supremamente excéntrico, tanto así que realizaba sus desplazamientos entre ciudades a bordo de helicópteros para evitar los puestos de control de la Policía.

Finalmente se logró establecer que el hoy capturado fue entregado al FBI y a la Policía colombiana gracias a que una de sus amantes lo delató y brindó información que permitió lograr su captura.