Tal como se dio a conocer a través del video publicado por el reportero gráfico del medio local diario, El Nuevo Día, Jorge Cuellar, se evidenció el grave daño y afectación que se habría podido producir a esta obra escultórica realizada por uno de nuestros más eminentes artistas plásticos, lo cual generó desazón entre la comunidad y una inmediata reacción de parte de la gerencia del IBAL que ordenó corregir dicha acción. 

Pero más allá del caso y la afectación generada a través de los operarios de la empresa de servicios públicos local, se pone nuevamente en evidencia el permanente estado de abandono y vulnerabilidad de los elementos culturales y artísticos de la ciudad de Ibagué puesto que obras como esculturas y monumentos que son de un gran valor, no solo por lo que se invirtió en ellas, sino por el patrimonio artístico y cultural que representan, muestran el poco o muy escaso interés que existe desde los entes oficiales para evitar que esto suceda, basta con echarse un pasada para ver cómo, por ejemplo, la locomotora del tren que ‘adorna’ la glorieta de la calle 19 frente a la Terminal de Ibagué, mantiene convertida en dormitorio y baño público de indigentes o habitantes de calle que además de utilizarla para realizar sus necesidades fisiológicas, también lo es para consumir vicio.

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Qué se puede decir de las esculturas que  están instaladas sobre el bulevar de la calle diez de Ibagué y fueron entregadas a la ciudad por artistas nacionales y extranjeros, han sido objeto del robo de sus partes, vandalizadas y pintadas recientemente por algunas de las damas que  participaban en las protestas de conmemoración del Día de la Mujer el pasado 8 de marzo, igual sucede con la efigie del fundador de Ibagué, Andrés López de Galarza, que se encuentra en el sector del SENA, la cual además de haber sido ‘trasteada’ o reubicada de sitio  en varias ocasiones, ha sufrido los embates de las protestas de algunos jóvenes que así lo expresan frente a la conquista española de que fuimos víctimas, en fin, por doquier que nos movilicemos en nuestra ciudad se refleja la destrucción y abandono del patrimonio público artístico y pareciera que no tuviera dolientes.

Volviendo al caso de La Flautista que fue afectada por la obra del IBAL en el Parque de la Música, hay que destacar que a través de un video, el gerente Rodrigo Herrera, salió a presentar disculpas a la ciudadanía por el hecho y de inmediato ordenó corregir esa acción,  como quedó evidenciado en la nota, pero caben varios interrogantes y es que si sucedió  con una obra artística de la ciudad, igual sucede en muchos casos con las obras o intervenciones de la empresa en las vías de la ciudad donde llegan a realizar trabajos, abren los huecos y no se tapan las zanjas, en muchos casos el remedio resulta peor que la enfermedad, igual sucede cuando se presentan daños, pasan y pasan los días, meses y hasta años sin que haya una solución. En otro sentido, es para preguntarnos quién o quiénes deben estar a cargo de los monumentos, obras y espacios culturales y del ornato de nuestra Ibagué que como dirían las abuelas, mantienen por lo general, ‘manga por hombro’.

Rodrigo Herrera, gerente del IBAL:

Dialogamos con el artista plástico ibaguereño, Olmer Rojas quien ha expuesto y paseado sus obras por países como Cuba, Brail, México Portugal, España, Suiza y Alemania pero que le ha entregado gran parte de su talento y obras a su querida Ibagué, las cuales podemos apreciar en sitios como el Palacio de Justicia, la sede de la Fiscalía, el sendero mitológico del barrio Galán con 8 esculturas y las Crisálidas construida con lo que fueron las rejas de las celdas del Panóptico de Ibagué y por supuesto en el Parque de la Música al igual que en El Espinal, Chaparral y Ataco, quién a través de un comunicado expresó su pensamiento sobre la situación, cabe anotar que esta obra de La Flautista, hace unos meses iba a ser objeto de hurto y recuperada para ser devuelta al sitio que hoy ocupa igual que sucedió hace unos años con El Bongoero que fue recuperado por la Policía cuando los ladrones lo llevaban de camino.

“Es lamentable que se vean situaciones generadas con tanta desfachatez y falta de pertenencia por los entornos públicos y sus monumentos como en el caso específico de el "sepultamiento" de la "Flautista". obra de mi autoría, que hace parte del grupo escultórico los Músicos.  Ubicados en el parque de la música de nuestra ciudad. 

Pero lo más lamentable es que un ente público como el IBAL no haya tenido la más mínima intención en tomar las medidas de protección de la obra para no afectarla .es igualmente arbitrario mientras Ibagué Limpia ha desarrollado campañas muy importantes en la concientización por el respeto por lo público y el patrimonio Cultural. Bajo la dirección de Carlos Uribe quien le felicito tan importante gestión,  

De manera contraria actúa el IBAL al no capacitar en una mentalidad y formación en el respeto y sentido de pertenencia hacia lo público y en especial al patrimonio cultural de la ciudad. crear así en sus operarios e ingenieros a cargo esta capacitación para que no se vuelvan a presentar situaciones similares que dan mal ejemplo a los ciudadanos.  

Y no es de más, puedan entregar la debida información de lo acontecido y las medidas a tomar. 

Creo en que la mejor contribución para la búsqueda de una mejor ciudad y ciudadanos está en ser sensatos con nuestros actos y a través de una crítica constructiva contribuir con un verdadero cambio. “, comunicó el artista.

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Ojalá este impase que afortunadamente fue corregido a tiempo gracias a la sensibilidad y sentido de pertenencia del gerente Herrera del IBAL quien tuvo el valor civil de reconocer el error de sus operarios y corregirlo a tiempo, sirva para que estas situaciones no se sigan repitiendo y a la vez para que desde el Gobierno Municipal se preocupen  no solamente por generar espacios de embellecimiento y cultura para Ibagué sino que se haga el cuidado y mantenimiento permanente de nuestro patrimonio, señora Secretaria de Cultura, señor gerente de Infibagué, señora gerente de la Gestora Urbana y a nuestro alcalde Andrés Hurtado, en sus manos está esa responsabilidad y a la vez para que a nuestros ciudadanos, niños, jóvenes, adultos y todos en general, se les ilustre sobre nuestro patrimonio cultural y se incentive a cuidarlo y respetarlo porque no se puede amar lo que no se conoce.

Escuche al artista plástico ibaguereño Olmer Rojas Lozano: