Pasar al contenido principal
Econoticias y Eventos
Ibagué
COMPARTIR
Se ha copiado el vínculo

La Unidad de Salud de Ibagué (USI) queda en manos del Gobierno Petro tras sorpresiva intervención

La toma de posesión desató una tormenta política en el cierre del 2025, con sectores que denunciaron una presunta retaliación del Gobierno Petro a puertas del año electoral.
Imagen
Personas
Descripción
USI de Ibagué intervenida.
Crédito
suministrada
31 Dic 2025 - 8:10 COT por Ecos del Combeima

Como uno de los hechos de mayor relevancia en la agenda pública de este año, la intervención forzosa de la Unidad de Salud de Ibagué (USI) por parte de la Superintendencia Nacional de Salud marcó un antes y un después en la autonomía administrativa de la capital tolimense.

La noticia, que tomó por sorpresa a los sectores políticos y gremiales, se convirtió rápidamente en el epicentro del debate en el Ping Pong Político de Econoticias.

El desembarco de la Supersalud

La operación, liderada por un equipo técnico de la Supersalud, se fundamentó en el deterioro progresivo de los indicadores asistenciales y financieros de la entidad.

Según el ente de control, la USI presentaba fallas críticas en la seguridad del paciente, escasez de insumos básicos y una cartera morosa que amenazaba la prestación del servicio en los centros y puestos de salud de las comunas ibaguereñas.

Como agente interventora fue designada Edilma Isabel Hurtado Cardona, quien asumió de inmediato la representación legal de la entidad con el objetivo de ejecutar un plan de salvamento.

No obstante, la medida fue recibida con escepticismo por algunos sectores que la calificaron como una "decisión política", mientras que otros, como el concejal Jorge Bolívar, la señalaron como la consecuencia inevitable de años de presunta mala gestión y burocratización.

El debate en el escenario político

El eco de la intervención resonó con fuerza en las declaraciones de figuras locales. Por un lado, sectores afines al Gobierno Nacional defendieron la medida como una acción necesaria para rescatar la salud pública de los ibaguereños.

Por el otro, desde la Administración Municipal se hizo un llamado a la calma, enfatizando que las dificultades eran problemas heredados y que la prioridad seguía siendo la atención a los ciudadanos.

Finalmente, la intervención no estuvo exenta de suspicacias políticas, ya que diversos sectores de la capital tolimense señalaron que la medida, ordenada desde el Gobierno Nacional, tendría un trasfondo electoral al ejecutarse a pocos meses de las elecciones legislativas de 2026.