Chaparral recibió de la Aeronáutica una inversión cercana a los $1.200 millones para el mejoramiento de la pista del aeropuerto

Cada vez está más cerca el sueño de que aviones comerciales lleguen y despeguen desde el aeropuerto de Chaparral, General Navas Pardo.
Eso se debe a la inversión cercana a los $1.200 millones que recibió el municipio por parte de la Aeronáutica Civil para el mejoramiento de la pista aérea.
“Estamos haciendo todos los requerimientos que pide la Aeronáutica y Satena”, explicó el alcalde municipal, Helver González Mora.
¿Qué están haciendo?
Esta redacción conoció que las obras que se harán en la pista iniciarían en mayo de este año para que así, los aviones de la aerolínea Satena, que operará la ruta desde y hacia Bogotá, puedan aterrizar en los 1.210 metros de longitud con 16 metros de ancho que cuenta el campo de aviación.
“Estamos en un estudio de mercadeo y en temas finales, esperamos tener la buena noticia para Chaparral y para el sur del Tolima de tener esa aerolínea, porque esta es una forma de avanzar y crecer todo el territorio”, reconoció el mandatario chaparraluno.

A su vez, el campo de aterrizaje cuenta con calle de rodaje y plataforma para el embarque y desembarque de los pasajeros.
“Esperamos que llegue antes de julio y estamos visionando la Feria Internacional del Café para el año entrante y esperamos tener todos los servicios para que sean más fácil para que las personas lleguen esos eventos”, indicó González Mora.
El desarrollo
Una vez que terminen las obras y sea puesto en funcionamiento el aeropuerto General Navas Pardo, será un motor importante para que la economía mejore y no solo beneficiará a los chaparrulanos, también a los municipios como Planadas, Ataco, Rioblanco, porque ahora querrán más cerca de llegar a la capital colombiana.
“Lo primero es de tener la oferta y luego hacer unas acciones integrales y transversales con todo el sur del Tolima a través del turismo, el comercio y la empresa privada para poder crecer y mantener la demanda”, reconoció el mandatario.

Y agregó que: “Contamos con nichos de mercados interesantes y hay que hacer una gran tarea para poderlos explotar”.
Es de recordar que en los años 50 e inicio de los 60, el aeropuerto fue vital para esa parte tolimense en donde aterrizaban aviones para abastecer a personal de la fuerza pública en los tiempos de guerra y violencia.
Finalmente, en esa pista se permite que aterricen aviones militares, de valores y algunos vuelos ambulancia y de Estado.