En un emotivo mensaje durante un encuentro con mujeres líderes del Tolima, la gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, compartió una experiencia personal que destacó la importancia de la empatía y el liderazgo humano en la función pública.

Durante la rendición de cuentas realizada el pasado martes, Matiz decidió, de forma inesperada, dar voz a sus secretarios para que también rindieran cuentas, un gesto que, según ella, fue inspirado por su fe y su conexión espiritual. Sin embargo, un malentendido con la secretaria de la Mujer, Luz Nelly Arbeláez, marcó el momento.

“Yo estaba enojada porque no estaba presente en la reunión, y cuando finalmente llegó, yo no sabía que estaba pasando por un momento muy difícil con su mamá, quien estaba gravemente enferma. Me sentí mal al saberlo, porque no lo sabía, pero eso me enseñó una gran lección sobre detenernos y recordar que todos somos humanos”, expresó Adriana Magali Matiz con voz quebrada.

La primer mandataria de los tolimenses aprovechó el espacio para ofrecer disculpas públicas a la secretaría y reafirmar su compromiso con los valores humanos en el liderazgo: “Esto no me hace menos líder; al contrario, demuestra que el liderazgo parte de ser mejores personas. Antes de formarnos en liderazgo político, debemos formarnos en liderazgo humano.”

En el marco de este encuentro, Matiz presentó el avance de la Escuela de Liderazgo, un proyecto que busca empoderar a las mujeres del departamento, combinando formación en el ser y en liderazgo político. Durante esta iniciativa las mujeres compartirán sus experiencias en liderazgo y desarrollo personal, fortaleciendo la construcción de una red de líderes transformadoras en el Tolima.