La Gobernación del Tolima, en coordinación con la Presidencia de la República, el Ministerio de Transporte, la Gobernación de Caldas y Parques Nacionales Naturales, avanza en su compromiso de equilibrar la movilidad y la protección del Parque Nacional Natural Los Nevados. En una reunión celebrada en Bogotá, las autoridades revisaron las disposiciones del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Ibagué plasmadas en el Acta Decisión No. AC-033 de octubre de 2024.

La implementación del pico y placa en la vía Murillo-Manizales durante los fines de semana es una de las estrategias clave para controlar la afluencia vehicular y minimizar el impacto ambiental. Esta medida busca garantizar la conservación del ecosistema en una de las áreas naturales más emblemáticas del país, mientras se asegura la conectividad vial.

Erika Lozano, secretaria de Ambiente y Gestión del Riesgo del Tolima, resaltó el compromiso ambiental del gobierno departamental: "Estamos trabajando para cumplir con la orden judicial, pero también para reafirmar nuestro compromiso con el medio ambiente. Este esfuerzo no solo se limita al Parque Los Nevados, sino que busca proteger todo el complejo de parques naturales de la región".

En el encuentro, Miguel Bermúdez, director operativo de la Secretaría de Tránsito del Tolima, subrayó la importancia de armonizar las medidas ambientales con las necesidades de los habitantes:

"Es responsabilidad de todos proteger el parque, pero también garantizar los derechos fundamentales de los tolimenses. Esta colaboración institucional busca lograr un equilibrio entre la conservación ambiental y el desarrollo económico".

Con el apoyo del Ministerio de Transporte, liderado por Luis Alejandro Zambrano, se discutieron soluciones como la fiscalización electrónica, la presencia de agentes de tránsito y nuevas reglamentaciones viales para reforzar la protección del parque y promover un turismo sostenible.

La Gobernación del Tolima reafirma su misión de asegurar que la vía Murillo-Manizales se convierta en un modelo de convivencia entre desarrollo humano y protección ambiental. Según Bermúdez:

"Queremos que este parador turístico sea un espacio donde se equilibren el desarrollo económico y la preservación de nuestra riqueza natural".

Esta articulación interinstitucional pone de manifiesto que la conservación del patrimonio natural no está reñida con el bienestar de las comunidades, y marca un precedente para futuras decisiones ambientales y sociales en el país.