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Cámara aprobó formalización del trabajo de las madres y los padres comunitarios

La aprobación se da en el marco del debate a la Reforma Laboral y se estima que beneficiará a las 69 mil madres y padres comunitarios que atienden a 1 millón 77 mil niños y niñas en Colombia.
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La formalización no solo traerá beneficios a las madres y padres comunitarios, sino que también mejorará la calidad de atención a la infancia.
Crédito
ICBF
8 Oct 2024 - 7:33 COT por Alfonso Aya Roa

En el marco del debate a la Reforma Laboral que se lleva a cabo en la Cámara de Representantes, fue aprobado el artículo 78 que establece que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar,  ICBF, vinculará progresivamente a las madres y padres comunitarios a su planta de personal como trabajadores oficiales, priorizando a aquellos grupos con mayores niveles de informalidad. Esto garantizará que estas personas, que cuidan de más de un millón de niños en Colombia, accedan a derechos como seguridad social, pensión y estabilidad.

"Colombia ha dado un paso crucial para la dignidad y el reconocimiento de las madres y padres comunitarios. Esta es una lucha de décadas y hoy, finalmente, les estamos otorgando el lugar que merecen como trabajadores oficiales", afirmó el Representante a la Cámara Alejandro Ocampo.

Y es que la formalización no solo traerá beneficios a las madres y padres comunitarios, sino que también mejorará la calidad de atención a la infancia. "Con seguridad laboral, estas personas podrán desempeñar su trabajo con mayor tranquilidad, lo que se traducirá en un servicio de mayor calidad para los niños y niñas bajo su cuidado", destacó Ocampo.

 

Los beneficios

Reconocimiento de derechos laborales: la formalización permitiría a las madres y padres comunitarios acceder a seguridad social, pensiones y otros derechos, lo que podría mejorar significativamente su calidad de vida.

Aumento de la estabilidad laboral: al estar vinculadas como trabajadoras oficiales, se reduciría la precariedad laboral y la informalidad, lo cual tiene un impacto positivo en la justicia social.

Mejora en la calidad del servicio: la seguridad y las condiciones laborales adecuadas podrían aumentar la motivación y, por ende, mejorar la atención a la primera infancia.

La medida también contribuirá a la reducción de la informalidad en el país y fortalecerá un sistema laboral más equitativo. "Sabemos que algunos tienen preocupaciones respecto al impacto fiscal de esta medida, pero este proceso se llevará a cabo de manera progresiva y responsable, asegurando que la inversión en las madres comunitarias sea administrada con eficiencia y en beneficio de los niños y niñas de Colombia”, puntualizó Ocampo.

El artículo 78 de la Reforma Laboral continúa su trámite legislativo y se espera que sea ratificado en los próximos debates en el Senado de la República. De ser aprobada en su totalidad, la iniciativa representará un hito en la lucha por los derechos laborales de las madres y padres comunitarios y por la equidad.