Que la platica del empréstito no se vaya a perder en campañas
La semana anterior el Concejo de Ibagué aprobó en primer debate de la Comisión de Presupuesto, un empréstito de 150 mil millones de pesos solicitado por la alcaldesa Johana Aranda, con el fin de utilizar esos recursos en pavimentación de vías urbanas, intervención de vías rurales, la ampliación de la calle 103, y una solución vial para la calle 60, según explicó a medios de comunicación, el secretario de Hacienda del municipio Angel María Gómez.
Aunque los propósitos suenan acordes a las necesidades de la ciudad, llama la atención, posturas como las del ex secretario General de la Alcaldía, Javier Triana, quien afirmó en sus redes sociales, que la administración municipal no debería estar pidiendo préstamos, cuando aún se tienen más de 53 mil millones en recursos de préstamos anteriores que no se han ejecutado. Adicional a la postura de Triana, preocupa en demasía, que se hable de que es el endeudamiento más alto en la historia de la ciudad, y el cual se tardaría más de 10 años en pagarse, comprometiendo vigencias futuras, pues prácticamente es una camisa de fuerza que limitaría al próximo mandatario en sus ejecuciones.
Y es que, frente a la polémica generada no solo preocupa el valor del empréstito, sino la poca socialización que ha tenido el mismo, y no estoy hablando de que los secretarios de Hacienda e Infraestructura vayan y expongan los argumentos en el recinto del Concejo, sino que se haga una socialización efectiva con la ciudadanía e incluso se les pregunté si están de acuerdo o no con esta decisión que tiene que ver con la plata de todos los ibaguereños. La alcaldesa Aranda se ha caracterizado por usar sus cuentas en redes sociales para hacer diferentes encuestas, relacionadas con el “Pico y Placa”, la calle por donde debería pasar los desfiles de junio e incluso sobre las decoraciones navideñas, pero en esta ocasión ha guardado sepulcral silencio y le ha dejado la tarea a sus aliados en el Concejo.
Aunque a la propuesta le falta pasar por la plenaria de ese recinto, es muy probable que el cabildo acceda por mayorías a la solicitud, toda vez que la única oposición que tiene Aranda es la de los Conservadores sin contar a Arturo Castillo, quien ha defendido a capa y espada la administración de la alcaldesa, e incluso se vio bastante molesto porque medios como Ecos del Combeima, hicieron un programa para debatir sobre la pertinencia del empréstito.
Esta misma semana, la hermana del hoy precandidato a la gobernación del Tolima: Andrés Fabián Hurtado, también lanzó en medios de comunicación su campaña a la Cámara de Representantes, y desde luego lo que más preocupa, es que esos dineros del empréstito vayan a caer en manos de dichas campañas políticas a través de contratos y prebendas, sobre todo cuando la misma alcaldesa Aranda se ha mostrado de manera premeditada e intencional, bastante molesta en videos de redes sociales, porque contratistas de su gobierno, al parecer apadrinados por los aliados políticos de su administración, han dado muestras de no estar a su altura, y a quienes catalogó como flojos, irresponsables y corbatas.
Yo celebro que se piense en mejorar la malla vial de la ciudad, en darle solución de vivienda a personas que lo requieren como las del Hato de la Virgen, sobre todo cuando existe un fallo judicial sobre dicha obligación, pero la alcaldesa Aranda tendrá que vigilar con rigurosidad que esos recursos no se pierdan en contratistas y políticos, ni mucho menos en obras fallidas como la del puente de la 60 al que le cabría bien el apelativo de “fantasma”, tal y como se usa equivocadamente desde las cuentas de redes sociales de Ibagué Limpia para mencionar la avenida entre el Terminal y el Estadio, la cual no es fantasma, porque finalmente se construyó.
Alcaldesa, de usted depende hacer historia en Ibagué con sus planes ambiciosos y necesarios para la ciudad. Estaremos vigilantes.