Pasar al contenido principal
Econoticias y Eventos
Política
COMPARTIR
Se ha copiado el vínculo

¿El jaramillismo aterriza en la Alcaldía de Johana Aranda?

Sandra Jaramillo y Gélver Dimas, personas cercanas al ministro de Salud, son dos de los nombres que, aparentemente, suenan tras bambalinas para la gerencia de la USI.
Imagen
1
20 Nov 2024 - 17:14 COT por Ecos del Combeima

Aunque parecían incompatibles como el agua y el aceite, el jaramillismo y el hurtadismo podrían estar encontrando un punto de convergencia en la administración de Johana Ximena Aranda.

Fuentes consultadas por Ecos del Combeima aseguran que toma fuerza la posibilidad de que el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo logre ubicar una ficha propia en la administración municipal, específicamente en la gerencia de la Unidad de Salud de Ibagué (USI). Esta vacante quedó disponible tras la polémica salida de Aura Acevedo, destituida luego de ser reprendida públicamente por la alcaldesa Aranda, quien alegó un presunto riesgo de pérdida de $10.000 millones destinados a la salud de la ciudad, el cual desmintió esta misma semana César Picón en Econoticias.

Imagen
1

En un principio, se especuló que Jorge Cabrera, el controvertido exalcalde de Venadillo, sería otra cuota del hurtadismo en la gerencia de la USI. Sin embargo, ahora circulan otros dos nombres más cercanos al ministro Jaramillo: Sandra Jaramillo, agente especial interventora de Famisanar, y Gélver Dimas, quien cuenta con una larga trayectoria en la gerencia de hospitales y cargos de salud pública.

Sandra Jaramillo destacó en su rol durante la intervención estatal de la EPS Famisanar, aunque su llegada a la USI, según las fuentes, podría postergarse hasta enero de 2025. 

Imagen
1
Crédito
LaRepublica.co

Por su parte, Gómez, con experiencia como gerente del Hospital San Francisco de Ibagué y en otros cargos estratégicos, también sería una opción para ocupar el cargo. Cabe recordar que Gómez está con Jaramillo actualmente en el Ministerio de Salud.

Imagen
1

La posible jugada política de Aranda al permitir la incursión de Jaramillo en su gabinete sería un movimiento calculado para evitar una intervención de la Supersalud en la USI, que enfrenta serias dificultades financieras tras la gestión de cuatro años de Andrés Hurtado, mentor político de la alcaldesa.

Esta estrategia, que podría parecer de ajedrecista, también explicaría algunos cambios recientes. Por un lado, la aparente buena relación entre Aranda y Jaramillo, marcada por la moderación de críticas al Gobierno Nacional y el reconocimiento público al ministro durante la entrega del acueducto complementario. Por otro lado, las presiones sobre Acevedo, que llegó a la gerencia de la USI sin respaldo político, habrían quedado en evidencia con el intento del concejal Giovanni Martínez de someterla a un debate de control político el próximo viernes que, de carambola, ahora le toca asumir al hurtadista Cabrera. (Ver más: El inesperado reconocimiento de Aranda a Jaramillo en la entrega del nuevo acueducto)

Finalmente, una señal clara de esta alianza naciente sería la transformación de lo que parecía una inminente intervención de la Supersalud en un modesto plan de mejora con el informe final de la Súper Salud a la USI. Este desenlace refuerza la teoría de que el jaramillismo podría estar aterrizando, lenta pero decididamente, en la Alcaldía de Johana Aranda.