Gimnasios para gatos: el emprendimiento de un joven en Ibagué
A sus 29 años de edad, Ánderson Barrios decidió apostarle a hacer empresa en Ibagué, y aunque el camino no ha sido fácil, hoy cuenta con orgullo cómo su trabajo goza de reconocimiento incluso por fuera del departamento.
Hace menos de seis meses, Ánderson, que hasta entonces trabajaba solo lo relacionado con muebles para el hogar, recibió el encargo de un cliente que le pidió tapizar un gimnasio para gatos, sin saber que a partir de ese momento empezaría a consolidar su propia empresa.
La satisfacción del cliente fue tan alta que Ánderson decidió potenciar sus conocimientos en torno a esa actividad y empezar a fabricar y comercializar estructuras novedosas para perros y gatos, con diseños propios o sugeridos por el comprador.
Su mamá y un amigo hacen parte de la microempresa familiar que opera y atiende sobre la avenida Ambalá , metros abajo del colegio Normal Superior en el carril descendente. Allí ocurre la 'magia' de Ánderson Barrios, el hombre que le pone arte a sus creaciones para mascotas.
Gatotón, como se llama su negocio, también ofrece estructuras que, sobre medidas, directamente se adaptan a un espacio residencial aprovechando las paredes, pisos y techos del lugar escogido.