Diógenes Salazar, gerente (e) de la Unidad de Salud de Ibagué, reconoció que a algunos contratistas todavía se les adeudan pagos por los servicios prestados durante el mes de julio; sin embargo, la situación al parecer sería resuelta esta semana con recursos girados por la Administración Municipal.

De igual manera, el funcionario manifestó que algunos de los incumplimientos en las obligaciones contractuales obedecen a que aparentemente no se entregan las cuentas y/o los soportes correspondientes para hacer el trámite que garantice las cancelaciones oportunas.

Según Salazar, los cerca de 120 contratistas que registran pagos pendientes y que laboran en las rutas urbanas y rurales del Modelo Integral de Atención en Salud (MIAS) en calidad de médicos, auxiliares y psicólogos, tendrían la garantía de un traspaso que recibirá la USI por el orden de los $2 mil millones.

Por último, ante la incertidumbre sobre la cancelación de servicios correspondientes al presente mes de agosto, el gerente (e) aclaró que dicho monto también servirá como músculo financiero para asegurar el cumplimiento de las obligaciones de la vigencia mensual que está en curso.