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Dispaurenia: cuando el sexo se convierte en una pesadilla

Muchas personas, en especial las mujeres, han sentido alguna vez un gran dolor al sostener relaciones sexuales, le contamos en qué consiste esta condición y que la puede causar.
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Tomada de Internet
3 Ago 2018 - 18:17 COT por Ecos del Combeima

 

 

La Dispaurenia es un término médico que suele describir el dolor que se siente durante el coito pero que puede incluso llegar a causar dolor en el juego previo y la excitación.

Según los expertos entre el 10% y 30% de las mujeres han experimentado esta condición en algún momento de sus vidas y si bien los hombres también pueden llegar a sufrirla los porcentajes son mucho menores.

En muchas personas este tipo de situación puede causar vergüenza por lo que muchas personas sufren de este tipo de problemas durante años hasta llegar a un punto en que el dolor se torna insoportable.

Según la doctora Norma Bejarano en las mujeres el dolor puede presentarse en cualquier tramo del canal vaginal e incluso en su vulva o zona pélvica, éste puede ser leve y continúo o llegar a ser un dolor crónico que puede asemejarse a una quemadura o irritación.  

“Luego de la baja de deseo sexual ésta es la segunda causa de consulta de las mujeres, es una de las disfunciones sexuales más comunes. Muchas mujeres callan sus problemas sexuales y solo luego de muchos años intentan buscar ayuda, muchas de ellas aprendieron a vivir un sexo doloroso y esto no debe ser así”, indicó Norma Bejarano.

La sexóloga comentó que una de las causas más comunes es que no haya una debida lubricación pues muchas mujeres al llegar a la madurez por los cambios hormonales hacen que haya una disminución en la lubricación natural.

¿Qué puede influir para desarrollar la dispaurenia?

  • Disminución de la lubricación vaginal
  • Cambios hormonales bruscos
  • Infecciones agudas o crónicas en el tracto urinario
  • Lesiones o traumatismos
  • Inflamación o trastornos de la piel de la zona genital
  • Espasmos involuntarios de los músculos de la pared de la vagina
  • Anomalías congénitas
  • Enfermedades de transmisión sexual
  • Miomas y endometriosis
  • Reacción dolorosa a un anticonceptivo químico u otro producto íntimo
  • Cicatrices tras un parto
  • Problemas psíquicos relacionados con el aprendizaje sexual o factores traumáticos
  • Demasiado estrés
  • Antecedentes de abuso sexual
  • Problemas de pareja