El 22 de junio, la procuradora delegada para la Gestión y Gobernanza Territorial, Tatiana Margarita Oñate, le pidió a los alcaldes del Tolima y Huila diligenciar en línea un formulario con el estado de los planes de acción de cara a los eventos de aglomeración y el uso de animales en actividades de entretenimiento.

Horas después de la tragedia del domingo pasado, en la que murieron cuatro personas y resultaron 386 heridas cuando asistían a la corraleja, la Procuraduría anunció la apertura de una investigación disciplinaria contra el alcalde Juan Carlos Tamayo porque ningún funcionario de la Alcaldía de El Espinal dio respuesta a este requerimiento.

Este caso podría derivar en la suspensión de Tamayo, quien está en el ojo del huracán por la dolorosa tragedia que hoy enluta a los espinalunos.

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Por otra parte, la Unidad Seccional de Fiscalía de El Espinal abrirá un proceso en averiguación de responsables, al que pueden vincular al alcalde y a quien construyó los palcos. 

En este caso, los familiares de las víctimas, entre ellos un menor de edad, se pueden constituir en parte civil para reclamar el pago de millonarios perjuicios.

Paralelamente, se conocieron imágenes en las que se evidencia que la infraestructura de la corraleja tenía deficiencias, pues se emplearon lazos de cabuya para unir los parales de guadua y las tablas de madera.

Además, el capitán Charles Benavides, director Nacional de Bomberos, indicó que al cuerpo de bomberos nunca llegó un requerimiento para inspeccionar el sitio donde se armó la corraleja.

En declaraciones a un medio nacional, Benavides indicó que “lo más seguro es que si nos hubieran hecho una solicitud para inspeccionar, al hacerlo con compañía del Comité de Gestión del Riesgo, no hubiera pasado la prueba de la inspección y no se hubiera llevado a cabo”.