Una familia a las afueras de Ibagué, cerca al corregimiento de Gualanday, vive en medio de la angustia luego de que su vivienda fuera incinerada en un hecho de intolerancia.

Según la denuncia, el responsable sería la expareja de una de las integrantes del hogar, quien tras una discusión habría prendido fuego a la casa en presencia de un bebé de apenas ocho meses.

Blanca Yamile Barragán, madre de familia y propietaria de la vivienda, relató que lo más preocupante es que el presunto agresor continuaría libre.

“Le pedimos a todas las autoridades que hagan el favor de hacer justicia. Él intentó con la vida del bebé, que tiene ocho meses, intentó con la vida de nosotros. Sí, no es posible que dejen a este individuo suelto”, expresó.

El incendio arrasó con todo lo que había en la vivienda: ropa, colchones, muebles, electrodomésticos, e incluso las herramientas de trabajo con las que la mujer sostenía a su familia.

“Perdimos todo lo que se entiende, todo. Yo cuando no trabajo en el restaurante vendo arepas y chorizos, y todo se quemó, absolutamente todo. La casa quedó en cenizas”, contó Barragán.

Aunque la Fiscalía habría otorgado una medida de protección, la madre de familia aseguró que la Policía no ha cumplido con el acompañamiento.

“Yo a la policía no la he visto para nada acá en esto. Desde que pasó ese percance no la he visto. Ayer estuve en la estación y les pedí el favor que colaboraran, pero no, por acá no he visto policía”, denunció.

Mientras tanto, han iniciado una campaña solidaria para reconstruir su vida. Solicitan ayuda con ropa, calzado, alimentos y materiales de construcción.

Quienes deseen colaborar pueden comunicarse al número de Nequi 320 911 4742, donde la familia recibe aportes para levantar nuevamente su vivienda.