Proyectos de reforma del gobierno de Petro en suspenso hasta después de las elecciones

Se espera que los proyectos de reforma pendientes del presidente Gustavo Petro se mantengan por el momento estancados, al menos hasta después de las elecciones regionales del 29 de octubre.
La administración reconoce que el estado actual de los asuntos políticos no es propicio para discusiones legislativas exhaustivas. Como tal, los proyectos se suspenderán temporalmente, lo que permitirá que el enfoque se desplace hacia las elecciones inminentes.
Con amplias promesas por cumplir y tiempo limitado para el debate, varios esfuerzos de reforma, incluidos los relacionados con la atención médica y las pensiones, quedaron pendientes de sus discusiones de segunda ronda tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado.
El sector educativo enfrenta dos proyectos de reforma que el presidente Petro anunció en julio, pero los textos detallados aún no han sido revelados. Una es una reforma a la ley estatutaria que se presentará en septiembre, mientras que la otra es una reforma a la Ley 30, aún en proceso de construcción de consenso y sin fecha de presentación definida.
En medio de la polémica derivada de las declaraciones del Presidente sobre el caso Odebrecht la semana anterior, volvió a insistir en la necesidad de una reforma judicial. Si bien el Ministerio de Justicia ha estado trabajando en este proyecto durante meses, su presentación sigue siendo incierta, dependiendo de los avances en otras áreas legislativas y de lograr un consenso más amplio.
Otras dos reformas, la laboral y la política, se abandonaron durante la sesión legislativa inicial. El gobierno, sin embargo, tiene la intención de hacer un segundo intento para aprobarlos. La reforma laboral causó preocupación entre los empresarios, mientras que la reforma política no avanzó más allá de la primera comisión del Senado.
La pregunta sigue siendo: ¿cuándo se les dará un cronograma concreto a estas reformas? El bloque parlamentario del gobierno espera noticias del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, sobre el avance de las conversaciones con los diputados individuales. Este enfoque tiene como objetivo convencerlos de los méritos de los cambios legislativos propuestos.
El presidente Petro aboga por un acuerdo nacional, pero las incertidumbres rodean la naturaleza de este "acuerdo". El senador Humberto de la Calle afirma que "Colombia se beneficiaría de una definición clara de qué temas, a juicio del Presidente, pueden ser parte de un acuerdo nacional y cómo está dispuesto a facilitar una discusión que no gire únicamente en torno a sus propias ideas". Esto se aplica a la reforma de salud".
Si bien algunos congresistas petristas están abiertos a discutir el contenido de las reformas para evitar el estancamiento político, persisten las preocupaciones de que el gobierno ha entablado un diálogo pero no ha escuchado de verdad. Estas discusiones, sin embargo, están experimentando retrasos debido a las ausencias del presidente Petro.
El presidente Petro inició esta semana reuniones con diferentes facciones parlamentarias, comenzando por el Partido de la U. Sin embargo, solo se reunió con los senadores de este partido, postergando la reunión con los diputados. El momento de esta reunión sigue siendo incierto.
El diputado Alfredo Mondragón del partido Pacto Histórico indica que “el gobierno seguirá priorizando el cumplimiento de su programa de país, enfocándose en cambios en materia laboral, de pensiones y de salud”.
Las dudas rodean la sinceridad del gobierno para entablar un diálogo, lo que llevó a algunos congresistas a tomar con cautela las declaraciones del presidente Petro. “El Presidente habla muchas veces de la necesidad de escuchar, pero parece que es el gobierno el que no escucha de verdad, ya que muchas veces presenta los proyectos tal como los imaginó, ignorando los aportes de los bloques parlamentarios y grupos de interés”, alega la senadora Paola Holguín, de la Partido Centro Democrático.
La pelota está en el tejado del Presidente, ya que la composición actual del Congreso no proporciona los números necesarios para aprobar las reformas propuestas. En el Senado, el Pacto Histórico ha asegurado 20 escaños y Comunes tiene 5. Sin embargo, el socio de coalición del oficialismo, Alianza Verde, está considerando retirarse, lo que le restaría 11 votos. Además, los 14 miembros del partido liberal también están debatiendo su futura afiliación.
La situación en la Cámara de Representantes es más compleja. El Pacto Histórico tiene 28 escaños, Comunes tiene 5 y el gobierno podría contar potencialmente con 11 escaños de la Alianza Verde y una parte importante de los 32 miembros del partido liberal. Sin embargo, el proceso de acumulación de votos avanza lentamente.
Los debates significativos se retrasarán varias semanas, y el pedido de la oposición, como lo expresó el senador Holguín, es claro: la necesidad de debates técnicos y no ideológicos.