El salto del puesto 14 en el año 2023 al 11 en 2025 en el Índice Departamental de Competitividad (IDC) demuestra la eficacia de un Plan Departamental de Desarrollo vivencial, y ejecutado en el territorio punto a punto como suele hacerse en el juego de Tenis.

Determinaciones con acciones, cuando la premisa fue que en el Tolima todo empezaría y terminaría con la seguridad, y quizá por ello el Tolima se ha mantenido seguro muy a pesar de las circunstancias de país que suele afectar la seguridad territorial y duplicar todo esfuerzo departamental.

Es la regla y la apuesta sigue ahí, la seguridad como determinante para seguir progresando. Tenemos señales que es la fórmula y no podemos dejarla de lado como fundamento del programa ¨Tolima Centro de Inversión´ que tanto se necesita.

En principio y por todo ese despliegue Institucional, pareciera injusto ubicar al Tolima en el puesto 16 con 6,63 en materia de Seguridad y Justicia, dentro del Pilar 1 de Instituciones del IDC., casi igual o peor que el año pasado, como si no se hubiese hecho nada, cuando históricamente y a diferencia de otros departamentos, su territorio ha sido recinto de grupos violentos, zona de conflicto y corredor casi natural de agrupaciones armadas.

La seguridad percibida en territorio tolimense no es circunstancial, es una determinación institucional que se denota y hoy goza del reconocimiento nacional por encima de otros muchos departamentos, pero que probablemente no ha logrado ser cualificada ni valorada en aquellos indicadores.

Pero no pasa nada, porque este contundente desempeño como eje central de su plan de desarrollo, así no sea reflejado en el IDC., seguirá siendo determinante para la estrategia gubernamental por mejorar el bienestar de los tolimenses.

La seguridad territorial es como la sal en la comida: solo se nota cuando no está. Sin ella, sin la seguridad, no podríamos aspirar siquiera a seguir mejorando estos Indicadores.

Cuando el Tolima asume el desafío de mejorar todo a partir de la seguridad, es ya un acierto, y fundamentalmente un gran mensaje para quienes tienen la capacidad de coadyuvar desde lo público o lo privado.

La Gobernadora Matiz dio vida a la Comisión Regional de Competitividad (CRC) como debe ser, pero de manera temprana también ha creado ambientes y saberes, para que toda esa estrategia se traduzca en un inmejorable resultado.

Se hace necesario mantener la adopción TIC, diversificar e innovar para seguir mejorando, pero estratégicamente debemos insistir en aprovechar y mejorar nuestra fortaleza agroalimentaria y turística, como también construir toda esa logística especializada que justifica tan privilegiada ubicación geográfica y cercanía al gran mercado nacional llamado Bogotá.

En fin, tenemos mucho por hacer, proponer, sugerir, recomendar y hasta ayudar para potenciar todo aquello que venimos haciendo bien; pues poseemos casi todo, solo faltaría darle continuidad al plan de desarrollo, mantener la confianza en la seguridad territorial y lograr a través del programa ´Tolima Centro de Inversión¨ la ejecución de grandes proyectos como la generación de muchos nuevos empleos.

No está lejos, toca seguir avanzando, y en esa mejora continua, llegar al ¨Top 10¨ de los departamentos más productivos y competitivos.