De acuerdo a Fidelia María Suárez Tirado, coordinadora nacional - ASMUBULI Colombia y Sintrasexco, el sindicato actualmente está conformado por 600 mujeres trabajadores sexuales que tiene como fin enseñarles y capacitarlas en la vulneración de los Derechos Humanos que primero como género tiene por desconocimiento y que a través de este mecanismo hacer respetar su actividad e integridad como persona. 

“Queremos decirle a las personas que somos el único sindicato en el país legalmente constituido como trabajadoras y trabajadores sexuales, hemos venido realizando actividades de sensibilización desde los centros de salud a todo servidor de esta entidad, también explicamos la vulneración de los derechos fundamentales en especial a las mujeres biológicas”, aclaró Suárez.

Fue enfática en resaltar que Sintrasexco ha intentado abrir muchas puertas como las de fuerza pública pero esta no se ha tenido resultados exitosos, “ya que según ellos no tiene en su agenda proyectos de trabajadores sexuales, sin embrago seguiremos insistiendo”.  

Lenguaje adecuado 

Con respecto a la vulneración puntualizó que este vive desde el lenguaje que se utiliza ante un trabajador o trabajadora sexual, “quiero decirle que nosotros no somos putas ni prostitutas, para nosotros la palabra puta se utiliza para desagradar es como un término o un dicho común cuando uno dice se me quedaron las putas llaves o deje la puta libreta, la palabra prostitución es algo que se utiliza desde hace mucho tiempo atrás, pero que hoy en día se ha convertido en pieza clave para las personas que dirigen algunas ONG´S, ente gubernamental y oficinas que dicen trabajar para el beneficio de nuestra población, la utilizan para impactar ubicándonos en una posición de víctima y discapacitada, mejor dicho pobrecitas que no tuvieron más que hacer”.  

Para el sindicato y todas las personas que conocen la existencia de este trabajo saben que se denomina trabajo sexual, el cual está reconocido a nivel Nacional, concluyó diciendo que están en la lucha para que regularicen el término para acabar con tanta explotación, con tanto estigma y vulneración de derechos.  

“Actualmente tenemos 600 mujeres trabajadores sexuales y estamos en proceso de llegar a 2000 en materia de formación y capacitación; para aquellas personas que estén interesadas en pertenecer al sindicato solo deben haber ejercido o estar ejerciendo el trabajo sexual, recordar a demás  que tenemos un carta de principios y que no somos una casa de beneficencia o andamos regalado mercaditos o enseñando a tejer o coser, estamos educando en Derechos Humanos”, manifestó la coordinadora. 

Agregó que también manejan los derechos laborales, incidencia política, liderazgo, derechos sexuales y reproductivos, todo lo concerniente a la violencia contra la mujer, es decir todo aquello que les compete constitucionalmente, “porque cuando decidimos ejercer nuestro trabajo sexual en el país y puedo decirlo que en el mundo entero inmediatamente los derechos son vulnerados se empieza una etapa de fina discriminación y sin tener derecho a nada comenzando desde el ente gubernamental, el Estado y la misma sociedad que nos rodea”.

Reunión 

En la mañana de este miércoles, en el barrio La Soledad en la localidad de Teusaquillo, el sindicato dará a conocer los resultados de la investigación    desarrollada por las mujeres trabajadoras sexuales que componen esta red, así mismo se entregará información como datos, cifras y estadísticas que dan cuenta del panorama que se vive en Colombia en cuanto a esta problemática. 

Fidelia María Suárez Tirado, agregó a esto que se explicarán los vacíos jurídicos, la indiferencia social, los imaginarios, la falta de voluntad política y el desconocimiento que existe sobre el trabajo sexual y cómo dichas situaciones han afectado a esta población.