El repudiable hecho de violencia intrafamiliar fue registrado en la vereda San Antonio, en zona rural de El Líbano, donde un campesino agredió a su esposa, golpeándola durante ocho horas, mientras la tenía amarrada de pies y manos.

Según la mujer de 31 años. "mi esposo actuó motivado por celos, pues había soñado que yo le le era infiel. Me dijo que había soñado que yo tenía otro hombre y que quería saber si era verdad y luego comenzó a pegarme patadas y puños en todo el cuerpo”

El hombre la agredió con puños, patadas y otros elementos que encontró en su camino. La mujer asegura que su pareja le aseguró que iba a matarla, sin embargo, en un momento salió y allí llegó un vecino, que guiado por sus gritos de socorro, pudo sacarla del sitio por una ventana.

Esta no es la primera vez que esta persona agredía la físicamente, pues meses atrás la golpeó fuertemente en el rostro. A pesar de que el agresor fue capturado por las autoridades, un juez le otorgó la libertad.