El cabecilla de los costeños fue deportado esta semana luego de estar preso durante tres años en una cárcel en Venezuela. Al llegar a Colombia la Fiscalía le imputó cargos por concierto para delinquir, homicidio agravado, reclutamiento de menores para la comisión de delitos, tráfico de drogas y porte ilegal de armas, de los cuales Palomino no aceptó ninguno.

“No acepto los puntos que está mencionando la Fiscalía”, aseguró el cabecilla del grupo ilegal a la pregunta del juez sobre su allanamiento a los cargos imputados.

La Fiscalía reveló el prontuario de Palomino por quien se ofrecía una recompensa de 500 millones de pesos, en el que habría reclutado entre los años 2012 y 2013 a dos niños de 14 años para enseñarles a matar y descuartizar personas.

“El segundo cabecilla al mando de Los Costeños siempre estuvo de acuerdo con el reclutamiento de menores de edad para la comisión de delitos. Además de dar las órdenes de reclutarlos, los enseñaba a matar y a descuartizar”, afirmó el fiscal.

Y es que, uno de los casos por los que Digno Palomino viene siendo procesado por homicidio agravado es el de Reinaldo Krauts, de 37 años, quien en el 2018 fue encontrado muerto y desmembrado. Al parecer, a este hombre lo asesinaron por haberse quedado con dineros de extorsiones.

Por lo mismo, la Fiscalía advirtió que el imputado no contaba con ninguna incapacidad mental o cognitiva, en el sentido que tenía pleno conocimiento de lo que hacía, enmarcando en que su actuar se constituía en una conducta reprochable.

“No tenemos material probatorio que certifique que Digno Palomino no gozaba de sus facultades enteles y cognitivas. Tenía pleno conocimiento de lo que hacía, era consciente y esto es una conducta reprochable”, agregó la Fiscalía.