Una desgarradora denuncia llegó a Ecos del Combeima por parte de la esposa del hombre que fue hallado sin vida y con signos de violencia en el Parque La Paz de Ibagué. Según la mujer, identificada como Rosy Amadelly Cetina Paez, Medicina Legal le notificó el pasado viernes en horas de la mañana que su esposo había sido asesinado “apuñalado e incinerado”, y que la identidad fue confirmada a través de huellas dactilares.

La víctima, que finalmente fue identificada como Carlos Alberto Ramírez Arroyave, era habitante de calle y enfrentaba una adicción a las drogas; según su compañera sentimental, aunque ella y su esposo son de Bogotá, él había trabajado en la capital tolimense y era considerado una persona de bien, pese a su difícil situación.

“Desafortunadamente él últimamente sí era habitante de calle por el problema que tenía de drogadicción, pero él no era un mal ser humano. Tengo cómo confirmar que él trabajaba allá en Ibagué y que era una persona de bien, a pesar de su triste realidad”, manifestó la mujer.

Lo que más le duele a la denunciante es que ni ella ni la familia han recibido información clara sobre lo que ocurrió. Afirma que no le han dicho cómo ni por qué sucedieron los hechos, y que hasta el momento no conoce avances en la investigación por parte de las autoridades judiciales.

“No sé por qué o cómo mi esposo llegó allá, ni por qué lo mataron de esa manera tan macabra. La información que se nos dio fue muy mínima y no se nos dijo en qué iba la investigación”, señaló.

A esto se suma el dolor de no haber podido ver por última vez el cuerpo de su esposo. “Me dijeron que no me lo iban a dejar ver puesto que habían comprobado su identidad por medio de huellas dactilares”, explicó.

La mujer, que no es residente en Ibagué, clama ayuda y orientación, pues no sabe a qué entidad acudir para pedir justicia. “No quiero que la muerte de mi esposo quede impune, pido ayuda porque no sé qué hacer… la zozobra me está matando”, concluyó entre lágrimas.

Tras la entrega de su cuerpo a sus familiares, finalmente las exequias de Carlos Alberto Ramírez Arroyave se llevaron a cabo en pasado domingo 20 de Julio y aunque sus familiares tuvieron que despedirlo sin siquiera poder ver su cuerpo, claman porque se esclarezca este crímen que los tiene conmocionados.

Este medio se solidariza con su dolor y hace un llamado a las autoridades para que se esclarezca este crimen que ha dejado a una familia en la incertidumbre.