El Tolima emerge como líder nacional en energía solar
Según la Asociación de Energías Renovables, de los 82 proyectos de energía solar en operación y prueba actualmente en Colombia, el Tolima lidera este ranking con 14 de ellos; consolidándose como el territorio con mayor número de proyectos solares de mediana y gran escala. Este hecho, que para algunos ha pasado silenciosamente, ubica al departamento en el mapa energético nacional como una nueva potencia en generación limpia.
Lo más relevante es que este liderazgo es la expresión de una convergencia virtuosa de condiciones técnicas, geográficas, económicas e institucionales que el departamento ha sabido capitalizar como parte de su estrategia Tolima Centro de Inversión-TCI. Así, un territorio reconocido históricamente por su vocación agroalimentaria hoy se posiciona como un referente nacional e incluso internacional en materia de energías renovables.
El primer elemento que explica este ascenso es una dotación natural excepcional. El Tolima cuenta con altos niveles de radiación solar durante buena parte del año, combinados con microclimas que reducen la variabilidad y aumentan la eficiencia de los parques fotovoltaicos. Aunque no alcanza los picos de radiación del Caribe, sí ofrece un comportamiento más estable y predecible, atributo especialmente valorado por los inversionistas. A esto se suma la disponibilidad de tierras aptas para grandes campos solares, muchas de ellas ubicadas en zonas intermedias con acceso estratégico a la red eléctrica regional operada por Celsia del Grupo Argos.
El segundo factor clave es la capacidad de conexión eléctrica, un cuello de botella crítico en gran parte del país. El Tolima avanzó tempranamente en la ampliación y fortalecimiento de subestaciones y anillos de distribución, generando condiciones ideales para que los parques solares se conecten sin la congestión que enfrentan otros departamentos. En el sector energético llegar primero hace toda la diferencia, y el Tolima llegó primero.
El tercer elemento es el acompañamiento institucional. Especialmente en materia ambiental Cortolima ha logrado consolidar tiempos razonables en trámites, licencias y procesos de evaluación, no por flexibilidad, sino por rigor técnico y coordinación con autoridades nacionales. Esta eficiencia regulatoria reduce incertidumbres y acelera las decisiones de inversión, en un momento en el que la transición energética avanza a velocidad global.
El cuarto factor es la confianza del capital nacional y extranjero. El Tolima se ha convertido en un territorio atractivo por su bajo riesgo operativo, los precios accesibles de tierra y la posibilidad de negociación directa con propietarios agrícolas. Esto crea un ecosistema óptimo para proyectos de escala industrial y ha facilitado la llegada de fondos de inversión, empresas desarrolladoras y recientemente capital asiático.
Todo esto ha sido acompañado por un cambio cultural profundo, donde un departamento tradicionalmente agrícola entendió que la energía solar no es una amenaza, sino un complemento. Tanto la Gobernación como sus municipios han visto en la transición energética nuevas fuentes de empleo, renta y dinamización económica. La transición dejó de ser un concepto y pasó a ser una realidad tangible.
El liderazgo del Tolima, es en esencia el resultado de decisiones gubernamentales oportunas, una infraestructura disponible y un interés privado sostenido. Es la evidencia que con estrategia, el Tolima puede convertirse en protagonista de la Bioeconomía.
La llegada de inversionistas nacionales e internacionales demuestra que el departamento está ya en el radar global y listo para consolidar su liderazgo aprendiendo y asegurando que esta transición energética sea también una transición social y económica para el Tolima.