¿Se está abusando de los contratos de logística para adjudicar 'a dedo' la contratación en Ibagué?
El informe de contratación de la Alcaldía que señala que el 96% se ha hecho de forma directa, dato refutado por el abogado Páramo quien indicó que sobre los montos sería solo del 80%, ha causado una gran controversia en la ciudad dado que una de las banderas de la campaña electoral de Jaramillo fue la de luchar contra la corrupción y velar por la transparencia en el manejo de los recursos públicos.
Si bien el alcalde no amarra licitaciones ni permite licitaciones chaleco - esto está muy bien- parece ser que viene abusando de la contratación ‘a dedo’ y si bien es cierto que uno debe gobernar con sus amigos las adjudicaciones deben ser transparentes.
En el caso puntual del contrato que se realizó para la celebración de los 466 años de Ibagué por 491 millones de pesos, se amparó en el hecho de que los contratos de prestación de servicios se contratan de manera directa la Alcaldía de Ibagué ha ejecutado un contrato de 491 millones de pesos para llevar a cabo las actividades previstas para celebrar el cumpleaños de la ciudad.
Que los contratos de prestación de servicios se celebren de manera directa no solo se explica por qué la normatividad legal así lo señala, sino porque la lógica lo impone. En efecto si un alcalde o gobernador tuviera que seleccionar por ejemplo a sus asesores en virtud de una licitación, se privaría de acompañarse de aquellos profesionales que le merecen confianza y credibilidad.
Sin embargo pensar que con el ropaje del contrato de prestación de servicios pueda ocultarse un contrato con un objeto plural como el que celebró el municipio de Ibagué, deja dudas que los órganos de control deben resolver.
En efecto, si bien el contrato anota que su objeto es el de prestar servicios logísticos, termina incluyendo los más variados suministros que van desde pasajes aéreos nacionales e internacionales, contratación de artistas, sonido, hospedaje, refrigerios y los más variados ítems que resultan sin duda extraños a la pretensión de contratar a alguien con el objeto de que preste un servicio.
De llegar a hacer carrera esta novedosa forma de contratación, la celebración del contrato estatal se simplificará por cuanto un logístico que se contrate podrá a su turno contratar servicios de los profesionales y personas que requiera, adquirir los suministros que el contrato demande e incluso contratar las obras y estudios que se necesiten.
Ocultar en los servicios logísticos la realización de tareas que implican la celebración de contratos estatales bajo cualquier modalidad distinta a la simple prestación de servicios del logístico es una burla a las reglas de contratación del Estado. No más contratos de obra pública o de consultoría, lo que en lo sucesivo se hará siguiendo la enseñanza de la administración municipal es contratar un logístico que compre los materiales y contrate los servicios del personal técnico ¿Para qué volver a hacer licitaciones?