Inicia la carrera por el contrato para el mejoramiento y optimización del acueducto y alcantarillado del IBAL
El IBAL inició el proceso para la contratación del polémico servicio de atención de emergencias de Acueducto y Alcantarillado.
Para este año la empresa tiene un presupuesto oficial de $5.497 millones, con estos recursos el ganador debe adelantar durante 5 meses las relaciones y adecuaciones que se le indiquen.
A diferencia de otros años esta vez la empresa de acueducto y alcantarillado solo hará una licitación.
“El ganador de la convocatoria deberá llevar a cabo la reposición total de las líneas de acueducto y alcantarillado identificadas por la Empresa, en las que se evidencia que por su antigüedad se han deteriorado y provocado daños en la malla vial”, indica la compañía.
A la par, avanza el proceso por $350 millones para contratar la interventoría del proyecto, el cual permitirá contar con un soporte técnico, administrativo y financiero entre la entidad y el contratista.
El gerente Juan Carlos Núñez, explicó que para garantizar la transparencia y el cumplimiento del objeto del contrato, se exigieron requisitos como: experiencia general en mínimo tres contratos relacionados con acueductos y alcantarillados, suscritos y ejecutados en los últimos 10 años.
“Con este contrato no se atenderán emergencias puntuales como en años anteriores, lo que haremos es llegar a esos sectores que tenemos identificados con tuberías obsoletas para hacer una reposición total y así contribuir en el progreso de la ciudad”, puntualizó el funcionario.
Cuestionamientos:
El ingeniero Jorge Mario Salazar radicó ante el IBAL un documento donde se solicita la modificación de algunos ítems de la experiencia específica, según indica Salazar en el pre pliego hay aspectos que irían en contravía de las disposiciones de Colombia Compra Eficiente.
“Las Entidades Estatales deben establecer los requisitos habilitantes de forma adecuada y proporcional a la naturaleza y valor del contrato. Es muy importante comprender el alcance de la expresión adecuada y proporcional que busca que haya una relación entre el contrato y la experiencia del proponente y su capacidad jurídica, financiera y organizacional. Es decir, los requisitos habilitantes exigidos deben guardar proporción con el objeto del contrato, su valor, complejidad, plazo, forma de pago y el Riesgo asociado al Proceso de Contratación. En los Procesos de Contratación que no son complejos es posible establecer requisitos habilitantes de baja exigencia. Por ejemplo, si el Proceso de Contratación es para la construcción de placa huellas es posible que la Entidad Estatal no exija experiencia adicional a la del título de ingeniero civil. Por el contrario, si el Proceso de Contratación es para la construcción de un viaducto, la Entidad Estatal debe exigir experiencia en la construcción de estructuras iguales o similares con una longitud inferior pero proporcional a la del objeto del Proceso de Contratación”.
Recordemos que en la administración del ex alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo el contratista consentido fue Didier Portela. Incluso en el último año de gobierno el contratista se quedó con los $7.492 millones ofertados.
Por ahora el proceso está en proyecto de pliegos, se espera que el 29 de abril inicie en firme y el 15 de mayo se conozca al nuevo contratista.
En campaña, el actual alcalde Andrés Hurtado cuestionó abiertamente este proceso, al punto que denunció que en el IBAL existía el cartel del Tubo.