Aunque las busetas en la capital tolimense dejaron de transitar a raíz de la cuarentena nacional obligatoria, la Alcaldía se vio en la necesidad de habilitar un servicio de transporte público para la zona rural con el fin de que los campesinos puedan movilizarse para fines de abastecimiento.

No obstante, únicamente una persona por cada núcleo familiar podrá acceder a los vehículos que fueron dispuestos por el Gobierno Municipal, y respetando el pico y cédula impuesto en todo el municipio en el que se habilita a los campesinos cada fin de semana.

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Según el secretario de Movilidad de Ibagué, César Fabián Yáñez, los carros en la zona rural no podrán transitar libremente, sino que tendrán que respetar las rutas y los horarios que sean establecidos. Además, deberán garantizar las condiciones sanitarias pertinentes para evitar la propagación del coronavirus.

Cabe mencionar que la persona escogida por cada familia campesina necesariamente tendrá que ser mayor de edad y menor de 60 años, portar los elementos de protección sanitaria básicos y evitar la interacción con otros durante los desplazamientos en el vehículo.