El sector salud del departamento enfrenta una situación crítica debido a la deuda millonaria que las EPS mantienen con la red hospitalaria pública, situación que pone en riesgo la prestación de servicios esenciales para los tolimenses. Según lo informado, la cartera asciende a casi 450 mil millones de pesos, una cifra alarmante que afecta directamente el funcionamiento de hospitales en los niveles de atención primaria, secundaria y terciaria.

En el Tolima operan actualmente 13 EPS, de las cuales nueve están intervenidas. La Nueva EPS, que afilia al 60% de los tolimenses, concentra la mayor parte de la deuda en la red pública, siendo la principal acreedora de hospitales como el Federico Lleras Acosta, uno de los más importantes del departamento.

"No hay un solo hospital que no tenga deuda con la Nueva EPS", aseguró un portavoz de las autoridades de salud, quien señaló que esta situación pone en riesgo la compra de medicamentos, la contratación de talento humano y, en última instancia, la garantía de servicios esenciales para la población.

El hospital Federico Lleras, que cuenta con una ruta oncológica clave para pacientes con cáncer, enfrenta enormes dificultades debido a los altos costos de los tratamientos. “Un solo medicamento oncológico puede costar entre 100 y 200 millones de pesos, y sin recursos, la continuidad de estos servicios está comprometida”, explicó.

Ante esta situación, las autoridades departamentales han alzado su voz para exigir a las EPS que atiendan con urgencia las necesidades del territorio. "No hemos cerrado servicios gracias a las indicaciones de la Gobernadora, pero necesitamos recursos para garantizar una atención de calidad, oportuna y humanizada", insistieron.

Para abordar esta crisis, se ha convocado una mesa de trabajo el próximo viernes, donde se espera establecer compromisos claros entre las EPS, la administración departamental y los hospitales. La Asamblea del Tolima también ha sido clave, mostrando un respaldo decidido al sector salud en momentos críticos.

A pesar de las dificultades, las autoridades han reiterado que su principal compromiso es garantizar los servicios de urgencias y proteger la vida de los habitantes del Tolima. Sin embargo, hacen un llamado urgente al Gobierno Nacional, las EPS y demás actores del sistema de salud para atender de manera estructural esta problemática que amenaza con paralizar la atención médica en el departamento.

“La salud de los tolimenses no puede esperar. Debemos encontrar soluciones inmediatas que permitan que supere esta crisis y asegurar que nuestros hospitales puedan seguir funcionando con normalidad”, concluyeron.