La temporada navideña apenas comienza y ya se reportan tres personas quemadas por pólvora en el departamento de Tolima, entre ellas una niña de 11 años. Las autoridades hacen un llamado urgente a la ciudadanía para evitar tragedias que empañen estas festividades.

El Hospital Federico Lleras, único centro en el departamento con Unidad de Quemados, está al 100% de su capacidad. Esta unidad cuenta con solo ocho camas – cuatro para adultos y cuatro para niños – y, aunque ninguno de los actuales pacientes está allí por pólvora, la saturación pone en evidencia la fragilidad del sistema frente a posibles emergencias.

Una niña de 11 años resultó con quemaduras graves y está siendo valorada por cirugía plástica.

Un adulto perdió una extremidad tras manipular pólvora.

Otro caso involucró alcohol y pólvora, una combinación que las autoridades advierten que puede ser fatal.

Con estos tres casos, registrados en los primeros días de diciembre, se teme que las cifras del año pasado, con 62 personas quemadas, se repitan o incluso se superen.

Desde la gestión social y las autoridades de salud se enfatiza:

• La pólvora debe ser manipulada exclusivamente por profesionales.
• Los padres deben evitar que los niños tengan acceso a estos elementos peligrosos.
• No combinar pólvora con alcohol, ya que esto incrementa los riesgos de accidentes graves.

Además, se hace un llamado a la protección de los animales y el medio ambiente, recordando que los estallidos de pólvora generan estrés, lesiones e impactos negativos en los ecosistemas.

“Estas fechas son para celebrar, para compartir en familia y no para lamentar tragedias que pudieron ser prevenidas. Necesitamos el compromiso de todos para que esta Navidad sea una época de paz y felicidad, no de dolor por una quemadura o pérdida”, señaló Katherine Rengifo, secretaria de salud departamental.