Líderes del sector del Cañón del Combeima en la zona rural de Ibagué, afirman que a diferencia de otros años por esta época en que se les veía volar en bandadas numerosas, actualmente extrañan su presencia y piden que no se les cace ni se les consuma.

“Hay una inmensa preocupación porque por miles veíamos las águilas cuaresmeras en este sector, tanto era que el cielo por partes se veía oscuro por tantas de estas aves sobrevolando en la zona, hoy en día he visto una sola que estaba en medio de una bandada de golondrinas”, dijo a Econoticias don Daniel Restrepo, presidente de Asojuntas del corregimiento 8 en zona rural de Ibagué.

Expresó que el calentamiento global y otros aspectos ambientales habrían estado disminuyendo o acabando a esta importante especie, agregó que además los campesinos y líderes de su corregimiento, ya tienen conciencia y saben que deben defenderla de los depredadores y los humanos que las amenazan.

“Debemos tener en cuenta que los seres humanos también tenemos gran parte de culpa en este daño ambiental, debido a que muchas veces las matan los cazadores e incluso se las comen cuando estos animales no tienen mucha carne y no son muy grandes porque vienen en vuelo desde el Canadá y Norte América hacia el sur de la Argentina”, explicó.

Afirmó que se debe perseguir y sancionar a las personas que las cazan mientras ellas vienen a descansar y a alimentarse en medio de su travesía realizando un importante control biológico para la agricultura y el medio ambiente porque se alimentan de pequeñas especies como ratones, lagartos y otros animales que capturan.

“Hoy en día ya no se ven los miles de aves de estas que llegaban y sólo he podido apreciar una de ellas, es muy triste y preocupante que por factores que generamos nosotros mismos los seres humanos, estemos acabando con las riquezas que nos brinda la naturaleza”, concluyó el líder comunal.