Asesinado el dueño de los termales del nevado del Tolima, Humberto Cañón Salinas.
El sábado a las cinco de la tarde, el señor Cañón se encontraba como de costumbre dándose un relajante baño en las aguas termales del sitio que durante muchos años se dedicó a construir y a cuidar como su más preciado tesoro, tanto era su esmero que el lugar es conocido por montañistas y turistas nacionales e internacionales como “Los Termales de Cañón”.
Se trata de un paraje ubicado a diez horas de Ibagué y a cuarenta minutos del sitio El Boquerón, donde en un cruce de caminos obligado en el Parque Nacional Natural de los Nevados, donde desde hace muchos años había llegado y se había estableció don Humberto, para convertirse en el guardián ecológico y ambiental de la zona y quien también brindaba techo, alimento y acogida a turistas locales y extranjeros que asiduamente visitan la zona del nevado del Tolima.
Econoticias pudo establecer que al señor Cañón Salinas en varias oportunidades le habían ofrecido comprarle el lugar para desarrollos turísticos o inversiones cuantiosas, ante lo cual el siempre se negaba, pues manifestaba que no era el propietario sino el ocupante de un predio que le pertenece a la naturaleza; tanto es así que hace cerca de dos meses ya había sufrido un atentado del cual a pesar de algunas heridas, se había librado de la muerte.
El sábado y aprovechando que se quedaba solo por un breve espacio de tiempo, Humbuerto Cañón fue acribillado por dos hombres que se arrimaron a la piscina termal disparándole en repetidas oportunidades y le cegaron la vida; el cuerpo de este guardián ecológico solo llegará a Ibagué en la tarde de este lunes y se espera su velación y exequias para el martes ocho de febrero.
Habitantes, montanistas, líderes y comunidad, piden a las autoridades se investigue y se de con el paradero de los asesinos y que como en muchos casos sucede en Colombia el crimen no quede en la impunidad.