Hasta las instalaciones del aeropuerto Perales de la ciudad de Ibagué, hizo su arribo una avioneta de la Policía Nacional en la cual se realizó el traslado de los cuerpos de los dos patrulleros tolimenses que fueron vilmente asesinados en Santander de Quilichao.

Una vez en vehículo se detuvo por completo se realizó una calle de honor con los compañeros de la institución, de tal forma que altos oficiales y subalternos comenzaron con los protocolos para poderlos llevarlos a los vehículos de la funeraria.

Contexto

El caso se registró a eso de las 6:30 de la mañana de sábado en la vereda Quinimayó, zona rural del municipio de Santander de Quilichao, donde integrantes de la columna móvil Dagoberto Ramos de las disidencias de las FARC dispararon indiscriminadamente contra dos uniformado de la Policía Nacional, que estaban cumpliendo con su deber tratando de recuperar una motocicleta hurtada.

Información revelada a la redacción judicial de Econoticias de Ecos del Combeima, indica que los dos uniformados pertenecían a la Policía del departamento del Cauca, pero eran oriundos de la ciudad de Ibagué en el departamento del Tolima.

Información conocida a través de fuentes en la Policía, da cuenta que los uniformados asesinados respondían a los nombres de José Alejandro Goyes Aguilera de 25 años de edad y Wilmar Alfonso Guzmán Martínez de 36, ambos en grado de patrulleros.

A los dos uniformados que se desplazaban en una patrulla motorizada, les hurtaron dos pistolas de dotación y su radio de comunicaciones.

De igual forma, en medio del atentado resultaron heridos tres civiles que transitaban por la zona, requiriendo su traslado inmediato hasta las instalaciones de un centro asistencial.

Según informó el general Jorge Luis Vargas, director de la Policía Nacional, se está ofreciendo una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que permita ubicar a los autores de este nuevo hecho criminal en el país.

De acuerdo con el alto oficial de la Policía, al menos 25 integrantes de la estructura guerrillera al mando de alias David, habrían sido quienes emboscaron a los uniformados. Los guerrilleros salieron a la vía con camuflado pixelado y brazaletes alisivos a las FARC.