Se presenta cierre de la vía Chaparral–Rioblanco por paro indígena

La vía que conecta a los municipios de Chaparral y Rioblanco, en el sur del Tolima, permanece cerrada debido a un paro indígena liderado por las autoridades ancestrales del Cabildo Indígena Nasa del resguardo de Barbacoas. La protesta fue activada en respuesta a presuntos incumplimientos por parte de la administración municipal de Rioblanco y la Gobernación del Tolima.
Según voceros de la comunidad, la decisión de bloquear el paso se tomó como medida de presión ante la falta de avances en compromisos previamente establecidos con las autoridades. La manifestación gira en torno a tres ejes principales:
- Derecho a la consulta previa: La comunidad denuncia que sus derechos fundamentales están siendo vulnerados al no ser consultados de manera libre, previa e informada en decisiones que afectan sus territorios, como lo establece la normativa nacional e internacional.
- Legalización del Comité de Reforma Agraria: Exigen la formalización de dicho comité mediante decreto, con el fin de poder avanzar en procesos de gestión de tierras y desarrollo territorial de forma autónoma y legal.
- Falta de inversión en infraestructura crítica: La comunidad también reclama negligencia estatal en la gestión de recursos para obras fundamentales. Entre los proyectos urgentes mencionan la construcción de varios puentes, incluyendo los de Carrusel, Cambrin (en la vía a Pomorroso), Cocora, Las Juntas y Barbacoas. Estas infraestructuras son consideradas vitales para la movilidad y seguridad de la población, y su ausencia ha tenido consecuencias fatales, según los denunciantes.
El cierre ha generado un impacto considerable en la movilidad de la región, afectando a transportadores, comerciantes y ciudadanos que transitan habitualmente entre ambos municipios. Las autoridades locales han hecho un llamado a establecer mesas de diálogo que permitan avanzar en soluciones concretas y duraderas.
La situación sigue en desarrollo, mientras la comunidad indígena reitera su disposición al diálogo siempre que haya voluntad política y compromisos reales por parte del Estado.