Fuertes lluvias registradas entre la noche del 21 y la madrugada del 22 de abril causaron serios estragos en el municipio de San Luis, en el sur del Tolima. Según informó el alcalde Ricardo Andrés Acosta, las precipitaciones fueron las más intensas de las últimas semanas y generaron desbordamientos súbitos de quebradas, así como el taponamiento de vías rurales.

Las zonas más afectadas son las veredas Salí y Cañada, donde el equipo de la administración municipal trabaja actualmente para restablecer la movilidad. Las emergencias han dificultado las labores de intervención previstas en las vías terciarias, ya que la prioridad se ha enfocado en abrir paso a las comunidades que quedaron incomunicadas.

Aunque no se han registrado personas lesionadas o víctimas fatales, sí hay restricciones para que los habitantes realicen sus actividades cotidianas como el estudio, el trabajo o el comercio.

La Alcaldía ha pedido a los ciudadanos que, si consideran haber sido damnificados por el invierno, se acerquen a reportarlo oficialmente, para que sus casos puedan ser trasladados a los entes de gestión del riesgo a nivel departamental y nacional.

Desde la Secretaría de Planeación y Gestión del Riesgo se mantiene activo un equipo operativo las 24 horas del día, con el fin de atender cualquier nuevo evento relacionado con las lluvias.

En cuanto al impacto en el sector agrícola, el alcalde explicó que, afortunadamente, el cultivo de limón —emblemático en San Luis— no ha resultado afectado. Por el contrario, las lluvias favorecen la producción del frutal, a diferencia de la temporada seca, que suele ser más perjudicial para los campesinos.

La administración municipal espera que las precipitaciones disminuyan en los próximos días para retomar los trabajos de mejoramiento vial en todo el territorio.