Un violento ataque contra un vigilante en un conjunto residencial de Ibagué ha causado indignación, Juan Pablo Amézquita, quien ejerce como guarda de seguridad del edificio Fronteras ubicado en el barrio San Francisco narró cómo fue agredido por cinco personas en estado de embriaguez que le propinaron una brutal golpiza, dejándolo con lesiones graves. Según el testimonio de la víctima, los responsables fueron puestos en libertad pese a la gravedad del hecho.

El hecho ocurrió alrededor de la 1:30 de la mañana del pasado domingo 8 de diciembre, cuando las cinco personas llegaron al conjunto solicitando ingreso para estacionar su vehículo. Amézquita explicó que, tras permitirles el acceso observó que estaban en estado de embriaguez y reportó la situación a su compañera para monitorear sus movimientos mediante las cámaras de seguridad. Posteriormente notó que los individuos arrojaron una lata de cerveza en el parqueadero y estacionaron en un espacio destinado a personas con discapacidad, lo que motivó un llamado de atención por parte del vigilante.

“Se les pidió que recogieran la basura y no estacionaran en un lugar prohibido. Aunque inicialmente lo hicieron, al salir comenzaron a insultarme y amenazarme,” declaró Amézquita. Minutos después, uno de los agresores intentó ingresar por un acceso restringido, lo que generó un altercado. El vigilante, quien intentó esquivar un golpe inicial, fue posteriormente atacado con mayor violencia.

Amézquita narró cómo los agresores lo persiguieron hasta el parqueadero, donde lo golpearon hasta dejarlo inconsciente. “Fueron cuatro hombres y una mujer. Perdí el conocimiento y me desperté en el hospital. Tengo fractura de tabique, del brazo izquierdo, y lesiones graves en el rostro y cabeza,” explicó. También indicó que durante el ataque le robaron un reloj y su carnet de seguridad.

A pesar de la captura inicial de los agresores, Amézquita denunció que fueron liberados poco después. “Es inaudito que estas personas sigan libres tras un intento de homicidio. Incluso, uno de ellos fue visto retirando el vehículo del conjunto,” aseveró.

El vigilante recibió una incapacidad de 45 días y está a la espera de nuevas evaluaciones para determinar si requiere cirugías. En su mensaje final, hizo un llamado a la tolerancia y reflexión, especialmente en épocas festivas, destacando la importancia de valorar la vida y respetar a quienes cumplen con su labor diaria. “Antes de actuar, pensemos. Todos tenemos a alguien que nos espera en casa,” concluyó Amézquita.