Hinchas del América critican restricciones en el estadio de Ibagué y piden seguir ejemplo de la Alcaldía de Petro
Hinchas del América de Cali se suman a las críticas por los cierres de fronteras y las restricciones al ingreso de aficionados de equipos visitantes en el estadio Manuel Murillo Toro de Ibagué.
Esta medida, adoptada por la Comisión Local de Fútbol en coordinación con la Alcaldía de Ibagué y otras autoridades, ha sido calificada como ineficaz por diversas voces, incluyendo al concejal Andrés Zambrano, quien señaló que posibilita que se infiltren hinchas.
Uno de los barristas del América de Cali, que prefirió no revelar su identidad, dialogó con Ecos del Combeima para invitar a las autoridades locales a replantear su postura y trabajar en conjunto con las barras para garantizar un espectáculo futbolístico en paz.
El hincha recordó que el origen de las restricciones actuales se remonta a un enfrentamiento con las barras del Deportes Tolima hace 12 años. Sin embargo, destacó que administraciones anteriores lograron avances significativos en la convivencia entre hinchas.
"Con el secretario de Gobierno que estaba, Milton [Restrepo], se nos colaboraba mucho. Él nos decía que nos daba el ingreso, siempre y cuando siguiéramos unas recomendaciones que teníamos que acatar", comentó, recordando que ese diálogo permitió el ingreso ordenado de los aficionados del América al estadio de Ibagué.
Según el barrista, las restricciones actuales han hecho de Ibagué una de las ciudades más complicadas para las hinchadas visitantes, en contraste con otras localidades como Manizales, donde se permite el ingreso controlado, como ocurrirá en el partido del América contra el Once Caldas en el estadio Palogrande este miércoles.
"Eso es lo que se debe vivir en Ibagué", expresó, al afirmar que prohibiciones estrictas generan descontrol y aumentan el riesgo de violencia al no identificar a los hinchas visitantes.
El hincha también recordó sus experiencias en Bogotá durante la alcaldía de Gustavo Petro, donde el diálogo entre las autoridades y las barras permitió desescalar la violencia y facilitar el ingreso de todas las hinchadas al estadio.
"Lo que se trata es de alentar al rojo toda la vida, pero no dejar la vida por el rojo. Una camiseta no es un motivo para que nos matemos", concluyó, llamando a la Alcaldía de Ibagué a abrir espacios de diálogo para garantizar la convivencia en los eventos deportivos.