El cruce de palabras entre el concejal Rubén Darío Correa y el secretario de Infraestructura de Ibagué, Diego Herrán, pasó del panorama netamente político a una serie de acusaciones que provocaron opiniones divididas entre otros concejales que hacían parte del debate.

Inicialmente, el funcionario del Gobierno Municipal abandonó los argumentos técnicos para limitar las capacidades de Correa solo a la realización de cabalgatas con 'caballitos de palo', haciendo alusión al evento que gestionaba anualmente cuando oficiaba como director de noticias de La Cariñosa.

Las reacciones

Como era de esperarse, la sorpresiva y polémica respuesta de Herrán en pleno debate de control político sacó de casillas al concejal de oposición, quien procedió entonces a cuestionar el bienestar mental de quien hoy tiene a su cargo la construcción de la calle 103 - con retrasos por las demoras en la subterranización departe de Celsia y Alcanos - y otros proyectos de infraestructura en la ciudad.

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"Uno pone en duda la idoneidad y la capacidad mental y psiquiátrica de un funcionario de esta altura (...) ante qué tipo de funcionario nos somete el señor Andrés Hurtado, lo único que faltó fue que nos pegara, porque hasta ademanes lo vimos haciendo de descontrol", sostuvo Rubén Darío Correa, quien también logró ofender a Herrán.

Zarta explotó

Otro que explotó fue el concejal Ricardo Zarta ante la respuesta del secretario de Infraestructura. En calidad de citante al debate, el cabildante del Centro Democrático aplaudió la decisión de apartar a Herrán del recinto pese a que su intervención aún no había terminado.

"Estoy totalmente asombrado por la falta de respeto del ingeniero Diego Herrán hacia la comunidad que vino a escuchar respuestas, no a que maltrate a los concejales (...) respete a la gente que está pendiente de que usted haga algo, usted no puede venir a estallar una bomba de tiempo", dijo Zarta-

Lo cierto es que en el Concejo Municipal de Ibagué no se están dando debates de altura en el marco del respeto y los ofensas van y vienen en medio de un debate que no tuvo grandes conclusiones.