La ‘novela’ que se generó en torno a los Monroy al parecer todavía no ha terminado. Habitantes del sector aseguran que la intimidación y el hostigamiento continúan, y manifiestan también que el respaldo de las autoridades ha sido nulo desde que decidieron regresar a sus viviendas en el barrio Irazú.

Cinco familias firmaron un oficio en el que aseguran que la Comisaría de Familia, Inspección de Policía, Defensoría del Pueblo y Personería Municipal han guardado silencio luego de haber intervenido por única vez en el caso.

En el documento incluso relacionan al secretario de Gobierno de Ibagué, Carlos Andrés Portela, a quien acusan de mentir ante los medios de comunicación cuando afirma que sí ha habido acompañamiento. Al funcionario de la Administración Municipal le atribuyen "indiferencia ante la grave problemática".

"No es cierto que nosotros como familia hayamos retornado en paz a nuestros hogares (...) rechazamos y deploramos el silencio y la falta de acompañamiento y cumplimiento de los compromisos que hicieron las autoridades mencionadas", dice el punto 4 del documento.

Del mismo modo, las familias exigen "a las autoridades que se pronuncien con contundencia", y advierten que "la anarquía que esa familia está sembrando en la ciudad" puede desencadenar en situaciones al margen de la legalidad.