Líderes y representantes de los taxistas de Ibagué se reunirán para decidir si la 'ola amarilla' se une al paro de busetas convocado para el próximo 31 de enero.

Se espera que los taxistas, quienes en ocasiones han mostrado divisiones internas, tomen una decisión definitiva antes del próximo sábado.

Eisenhower Echeverry, presidente de la Asociación de Propietarios de Taxis de Ibagué, señaló que la intención es respaldar el sistema de transporte en sus diferentes modalidades.

"Esperamos ponernos de acuerdo todos los sectores que componen el servicio de transporte público individual, tipo taxi, para que entremos", afirmó Echeverry.

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El líder gremial también expresó preocupación por la situación del transporte de carga liviana, que según él está en "cuidados intensivos".

Echeverry aclaró que unirse al paro no sería una decisión precipitada, ya que se han realizado reuniones para evaluar tanto esta posibilidad como el problema de la informalidad.

"Si salimos a hacer esto es porque reclamamos y defendemos los legítimos derechos que nosotros tenemos, como lo es defender el patrimonio", puntualizó.

No obstante, pese a los anuncios del paro, algunos sectores consideran que la propuesta ha perdido fuerza después de que se conociera que la Alcaldía de Ibagué expediría las tarjetas de operación para una parte significativa de la flota de busetas de la ciudad.