Ejemplar reacción del restaurante La Casona ante requerimientos de la Secretaría de Salud Municipal
Luego de que la Secretaría de Salud de Ibagué le ordenara al restaurante La Casona tomar correctivos en un periodo máximo de ocho días ante los aparentes focos de contaminación evidenciados en sus instalaciones principales, la reacción del establecimiento fue inmediata.
En no más de 24 horas se subsanaron las presuntas irregularidades generadas a raíz de la carencia de actividad comercial en el lugar, anulando así los potenciales escenarios de propagación del dengue mediante mantenimiento de la zona verde e intervención en la piscina.
María Camila Contreras, propietaria del restaurante, le explicó a Econoticias que como consecuencia de la orden de aislamiento preventivo obligatorio, se vieron en la necesidad de reubicarse en el sector de Calambeo para funcionar a través de domicilios bajo estrictos protocolos de bioseguridad.
De acuerdo con la empresaria, el personal incluso ha estado en calidad de residente para evitar que en los desplazamientos hacia sus viviendas puedan resultar contagiados. Además, los productos está siendo despachados con el uso de máquinas de sellado especial.
Ante el aparente abandono del predio en La Pola, Contreras dio a conocer que la persona encargada de los mantenimientos locativos al parecer no pudo acceder a las autorizaciones entregadas por la Alcaldía para ser exenta de la cuarentena y de esa manera cumplir con las labores correspondientes.