Esta semana se conoció que la meta para bajar el desempleo en la ciudad de Ibagué es de tan solo un punto es decir del 16.1% al 15% lo cual ha resultado en un gran choque de opiniones dada la relevancia del tema. “Hemos encontrado que las metas en cuanto al índice de desempleo son desalentadoras, queda un triste porque estamos ocupando el tercer puesto a nivel nacional y vemos que las inversiones que pretende desarrollar la Administración en los próximos cuatro años solo bajará un punto, pareciera que el Plan de Desarrollo no está diseñado para atacar esta problemática”, aseguró el concejal Andrés Portela. 

¿De tercer a primer lugar en desempleo en el país? 

El Ping Pong Político habló con el doctor Alejandro Rozo, reconocido personaje político y económico de Ibagué, se encuentra realizando estudios con el Observatorio de Empleo y explicó que los Planes de Desarrollo tienen varios tipos de metas entre ellas de Impacto que van directamente a la población y de resultado, en este sentido indicó que “el programa de Jaramillo habla sobre un programa llamado Ibagué, emprende, produce e innova donde el indicador es la tasa de desempleo de Ibagué de acuerdo a una línea base de 16.1% y la meta a cuatro años es apenas de 15%, es decir bajaría 1.1% y para mí esto es preocupante porque no se estaría trabajando el tema de forma responsable, veo unas metas de capacitación que componen una actividades específicas sin embargo la constante desde el 2001 era bajar el desempleo”. 

El experto indicó que de no prestarle mayor atención  al tema se podría pasar del tercer al primer lugar de desempleo en el país. En el pasado Rozo trabajó un proyecto sobre la reindustrialización de Ibagué en conjunto con las Naciones Unidas que buscaba contrarrestar el desempleo el cual tiene muchas causas, una de las causas específicas del proyecto era crecer económicamente desde un concepto de industrialización pues Ibagué no ha tenido ningún tipo de beneficio tributario desde la época de la tragedia de Armero. 

“Si miramos el comportamiento del PIB entre 1988 cuando se creó la ley y 1998 el crecimiento de Ibagué fue del 6,8% y el nacional de 5,1% es decir estábamos por encima del crecimiento del PIB y no había desempleo, sin embargo del año 2000 al 2012 el crecimiento es apenas del 3,9%  frente al 6,4% nacional lo cual significa que nuestro problema de desempleo se debe al bajo comportamiento de la demanda y la participación económica a nivel nacional, por lo cual se deben tomar acciones estratégicas que puedan traer inversión. Por otra parte debe existir articulación entre el sector productivo, educativo y el Gobierno, cuando uno ve el Plan de Desarrollo de Jaramillo es preocupante porque estaría generando 3.000 empleos en 4 años”, explicó Rozo. 

El asesor aseguró que la preocupación que ha manifestado el Concejo Municipal es válido y que es muy posible que el alcalde Guillermo Jaramillo este mal asesorado en el tema del desempleo.

Desempleo: ¿El Talón de Aquiles del modelo de izquierda de Jaramillo?

Como en otros modelos izquierdistas la administración del actual alcalde está enfilando su esfuerzo en la salud y la educación, sin embargo para que la economía se desarrolle deben haber empresas, estimularlas y combatir a profundidad el desempleo pues de allí donde se obtienen los recursos que permiten realizar inversión social. 

Es por ello que la gestión del alcalde se debe complementar entre el tema social y la atracción de inversión hacia el municipio, pues mientras exista una tasa tan alta de desmpleo en la ciudad será muy dificil alcanzar un desarrollo conjunto. 

Con respecto a los argumentos de algunos defensores del Plan de Desarrollo que aseguran que metas bajas son más fáciles de cumplir y que de ahí en adelante todo es ganancia, el experto afirmó que “si hubiera tenido la responsabilidad de crear esa meta yo no la habría planteado tan baja, porque eso es apostarle a mantener el desempleo y conservar el tercer lugar a nivel nacional, Ríohacha que tiene el 5 lugar tiene un 15.1% es decir que en cuatro años vamos a seguir entre estos primeros cinco puestos”. 

El director del programa Ibagué Cómo Vamos, Edwin Martínez, se mostró a favor de la meta planteada contrario a su posición reciente en el diario El Nuevo Día, por la administración Jaramillo, e indicó que no están desfasadas frente a la coyuntura económica del país, “incluso esta meta de 1.1% puede ser difícil de cumplir con la situación actual, es difícil que las autoridades en los Planes de Desarrollo no se planteen una buena meta en tema de desempleo pero la economía colombiana depende mucho del precio del petróleo y esta variable no se puede prever”. 

Los recursos del sector privado pueden ser infinitos con gestión mientras que los públicos NO

Para nadie es un secreto que uno de los grandes problemas de Ibagué es que el empleo gira alrededor del Estado y no se busca inversión privada que pueda generar nuevos puestos de trabajo, además el DANE expuso que cuando la economía nacional se recupera y el mercado laboral se fortalece, Ibagué es la ciudad a la que más le cuesta retomar el rumbo.

Juan Pablo Sánchez, gerente de Ecos del Combeima, afirmó que "necesitamos un alcalde que consiga recursos privados, los recursos privados son infinitos mientras que los públicos son finitos, si nuestros propios lideres dicen que la meta es bajar un 1.1% y los expertos se complacen con esta meta, entonces 'apague y vamonos' porque para que elegimos un mandatario si solo vamos a pedir 1%". 

Alejandro Rozo expresó que aun cuando la situación del país que se plantea es cierta, el alcalde de un municipio debe ser generador de iniciativas que fortalezcan el empleo en la ciudad, pues mientras no se atraiga inversión y se potencialice trabajando estratégicamente sin importar las condiciones nacionales lo local nunca va a mejorar.

¿Y la Zona Franca para cuándo?

Alejandro Rozo además aseguró que se debe potencializar el sector de la industria pues la construcción tuvo un auge pero se desacelero y en este momento lo único que está generando empleo es el comercio y más cuando se cuenta con 2.500 hectáreas aprobadas en el POT para industria y una zona franca.  

“Desde el año pasado se ha venido generando una dinámica donde diferentes gremios como la ANDI, la CCI y otros gremios del sector industrial y agroindustrial han querido proponer un proyecto de acuerdo de incentivos tributarios que atraigan inversión, pero el alcalde debe desligarse de la imagen Petro-Chavista porque eso causa temor e incertidumbre entre los empresarios, necesitamos fortalecer la zona franca porque este es un punto neurálgico para nuestra economía”, subrayó Rozo. 

Uno de los inconvenientes de la ciudad es que hay sectores privilegiados que se les estimula mientras a los demás empresarios se les hace a un lado, los capitales ‘golondrina’ que llegaron a Ibagué fueron beneficiarios de incentivos tributarios a cambio de un par de empleos sin embargo en un lapso muy corto de tiempo se fueron y el tema del desempleo empeoró.

Las cooperativas, los sitios de culto religioso y el Deportes Tolima han sido parte de estas empresas privilegiadas y entraron a ser revisadas por la Secretaría de Hacienda en cabeza de Juan Espinosa a principios de año. 

“Tenemos aproximadamente 48 mil desempleados y 42 mil personas en sub empleos es decir cerca de 90 mil personas, con el 1.1% estaríamos hablando de llegar aproximadamente a 45 mil desempleados en 4 años, es decir nada”, concluyó Alejando Rozo. 

Día del Comerciante 

El próximo 24 de mayo se celebrará el Día del Comerciante, un evento organizado por Fenalco muy seguramente con la intención de resurgir de la figura deprimente que dejó el director anterior trazando nuevas metas que orienten el desarrollo. 

Un factor que nunca ha sido medido es el de la informalidad, siendo este uno de los grandes ingresos de muchas familias ibaguereñas por lo cual se necesita un trabajo conjunto entre todas las organizaciones y autoridades para generar alternativas que lleven a soluciones reales. 

“Necesitamos unos gremios económicos activos y férreos en pro de la defensa de los empresarios de la ciudad, que no vuelva a suceder el acomodamiento al estilo Édgar Rodríguez que por un contrato con las Fiestas, el Indri, el Panóptico o lo que fuera se acomodaba y no denunciaba, más que nunca se necesitan gremios que sienten posiciones y defiendan a los empresarios”, puntualizó Juan Pablo Sánchez.