El fantasma del apagón volvió esta semana a dejarse ver en el sector energético nacional cuando los distribuidores lanzaron un SOS al Gobierno para solucionar problemas financieros y evitar impagos a las empresas generadoras.

Empresas Públicas de Medellín, EPM, en un comunicado señaló que las empresas del Grupo están preparadas para este momento y no se encuentran en riesgo financiero, aunque entienden, comparten y se solidarizan con la situación por la que pasan algunas compañías del sector.

“Esta circunstancia, que no es una coyuntura del momento, fue ocasionada, tiempo atrás, por las medidas especiales adoptadas para acompañar a los usuarios durante la pandemia del COVID-19; la pospandemia y el comportamiento de los indicadores económicos que jalonaron el incremento de las tarifas, y el Pacto por la Justicia Tarifaria, que coincidió con los aumentos”, sostiene la empresa antioqueña. 

La empresa hizo un llamado para que se resuelvan los temas estructurales de las empresas del sector eléctrico, pero también para encontrar cómo se generan beneficios o alivios para los usuarios. De tal forma, que en un correcto balance, queden las compañías saneadas y los usuarios tranquilos. 

Al referirse a la posibilidad de un apagón en Colombia, producido por el fenómeno de El Niño y la cantidad de energía suministrada, EPM reiteró que esta posibilidad la resuelve la Central Hidroituango, con el próximo ingreso de las unidades 3 y 4 de generación de energía. Por ello, es importante que se rodee al Proyecto y se faciliten todos sus frentes. 

A este panorama se sumó el incremento de las tarifas de energía que llevó al deterioro del recaudo y la liquidez de muchas de las empresas distribuidoras de energía, debido a la dificultad de un grupo de usuarios de pagar sus facturas de manera oportuna. Entre tanto, los subsidios para el consumo de energía de los estratos socioeconómicos 1 y 2, que gira el Gobierno Nacional, no han sido pagados al día. Con ello, las empresas distribuidoras han prestado a los usuarios y al Gobierno, pero a su vez han tenido que seguir pagando oportunamente a los generadores. 

Aclaró que el mayor riesgo de apagón, si no se resuelve la situación actual, se encuentra ligado a que las empresas distribuidoras dejen de pagar a los generadores y se les limite el suministro de energía, como indica la regulación.