Álvaro Vargas, integrante de la Central Unitaria de Trabajadores-CUT-, expresó que el aumento del salario mínimo adoptado por la Presidencia de la República es aceptable ya que hicieron falta más concertaciones.

Recordemos que pasó de $781.242 a $925.148 tras una reunión de concertación entre el jefe de Estado, Iván Duque Márquez, el sector privado y las centrales de las clases obreras.

También debemos indicar que este nuevo aporte quedó de la siguiente manera:

*6% el incremento en el S.M.L.M.V y el *10% para el auxilio de transporte público.

Vargas aseguró además que esta postura es normal ya que ellos querían que ese incremento fuera del 10% y no del 6% como quedo.

“A nivel de los trabajadores existen unas diferencias sustanciales como quieran que en el marco de la argumentación planteábamos la necesidad de incrementar el salario mínimo en 9 puntos con base al año anterior el cual estaba en 781.242 y que se da hoy un incremento del 5.9% donde ha quedado el salario para esta oportunidad en 925.148 lo que indica que aumento son 6 puntos, sin embargo, hay puntos de reflexión”.

Álvaro Vargas, integrante de la Central Unitaria de Trabajadores-CUT-, también deja claro que la aprobación de la Ley de Financiamiento o mal llamada reforma tributaria sobre la evasión y exenciones son los puntos de reflexión que no se tocaron en esa mesa de concertación entre el Estado, el sector público y las clases obreras. 

Deja claro que, en Ibagué, el Tolima y en Colombia sigue existiendo un empleo Chatarra como lo es el teletrabajo y el que se deriva de las bolsas de empleo.

“En este país se precariza mucho el empleo lo que indica es que esa postura de que se van a incrementar los empleos y que a través de la economía naranja se va a generar una amplia posibilidad, no es del todo cierto, la verdad es que en Colombia se da es un empleo chatarra quiere decir aquellos que salen de las bolsas de empleo, el teletrabajo, en contratos a término fijo, es decir de 3 a 6 o a hasta un año”.

Seguido de ellos agregó sobre el empleo que:

“En Colombia hay un trabajo indecente no decente y que va en contravía naturalmente de las posibilidades de brindarle al pueblo colombiano una mejor oportunidad en ese marco”