Deportes Tolima sumó una nueva derrota en condición de local, esta vez ante Atlético Bucaramanga, un equipo que llegó de la segunda división del fútbol profesional colombiano y que todavía no había ganado ni un solo partido en lo que iba corrido de la Liga.

No obstante, ante el mal momento que vive el equipo, el déficit de resultados y las continuas derrotas en la presente temporada, los reclamos de la afición no se hicieron esperar, siendo Alberto Gamero -cabeza visible de la institución (en lo deportivo) y directo responsable del penoso rendimiento- objeto de múltiples improperios.

El estratega samario tuvo que entrar el túnel custodiado por el ESMAD en medio de cientos de hinchas que querían manifestar su inconformismo con el manejo que el 'profe' de ha dado el club y la alineación de jugadores que poco o nada le aportaban al equipo, pero que aún así seguían siendo inamovibles en su estructura.

Si bien Gamero no se presentó a la rueda de prensa, esta redacción conoció que ya presentó formalmente su renuncia, la cual sería aceptada por las directivas del club.