Año nuevo, renuncias nuevas: el reloj corre para funcionarios del Tolima que sueñan con alcaldías y Gobernación
El fin de 2025 no solo marca el cierre de un año administrativo, también abre un nuevo ciclo de cálculos políticos en el Tolima.
Para los funcionarios públicos que contemplan aspirar a una Alcaldía o a la Gobernación en las elecciones regionales de octubre de 202, el calendario legal ya empezó a avanzar.
La legislación electoral establece que quienes hayan ejercido autoridad política, civil, administrativa o militar, o hayan intervenido en la ordenación del gasto o en la celebración de contratos en el respectivo territorio, no pueden ser candidatos si permanecen en el cargo durante el año previo a la elección.
En consecuencia, los aspirantes deberán renunciar a más tardar a mediados de 2026 para no incurrir en inhabilidades.
La norma, contenida en la Ley 617 de 2000, busca evitar que el ejercicio del poder público se convierta en ventaja electoral y también restringe a quienes, en el año anterior a los comicios, hayan gestionado negocios o contratos con entidades públicas en interés propio o de terceros en el municipio donde pretendan aspirar.
Este escenario convierte al 2026 en un año clave: muchos deberán decidir si su meta para el nuevo año es mantenerse en el cargo o dar el paso definitivo hacia una candidatura.
Año nuevo, metas nuevas, pero con plazos legales que no admiten improvisaciones.