Con el propósito de garantizar el suministro de agua para sus actividades productivas, la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima, entregó y puso en operación las obras de mantenimiento del reservorio del resguardo indígena Olirco de Natagaima.

Cerca de $90 millones invirtió la corporación en la construcción de un nuevo aliviadero que  permitiera evacuar los excesos de agua, pues la estructura anterior ya no contaba con la capacidad para el manejo del caudal y en época de lluvias el líquido se desbordaba.

La directora de Cortolima, Olga Lucía Alfonso Iannini, explicó que la obra beneficia a 426 personas de la comunidad indígena, agrupadas en 48 familias, que dependen del correcto funcionamiento del reservorio para el sostenimiento de cultivos y la producción de ganado.

“La idea es estar en el territorio y apoyar a las comunidades indígenas con obras, sobre todo en Natagaima que tiene tantos problemas con el suministro de agua. En ese sentido, el reservorio genera muchos beneficios para el riego de la zona y, en general, para todas sus actividades productivas”, indicó la funcionaria.

El reservorio fue construido en 2010 por la corporación para asegurar el abastecimiento y aprovechamiento de líquido ante el déficit hídrico y el aumento de las temperaturas en esta región del Tolima, situación que se ha agudizado por efectos del cambio climático.

“Estamos muy contentos con esta obra porque fue realizada con los mejores estándares, hubo participación de la comunidad y estamos garantizando el líquido vital para mitigar los efectos del Fenómeno de El Niño y mantener el cultivo de pasto de corte, plátano y el proyecto productivo de ganado”, dijo Vladimir Peralta, gobernador del resguardo.

Además del nuevo aliviadero, el proyecto incluyó la construcción de gaviones en piedra con su respectivo relleno para garantizar la estabilidad de uno de los taludes del reservorio.

Alfonso Iannini recordó que en sus primeros cuatro años al frente de Cortolima se destinaron más de cinco mil millones en proyectos que beneficiaron directamente a comunidades indígenas. Y ahora, para el segundo periodo, se prevén inversiones cercanas a los seis mil millones dirigidas a esta misma población.