Según las cifras proporcionadas, los municipios con mayor número de afectados son Ibagué, con 21 casos, seguido por El Espinal con 5, Ortega y Guamo con 3, y Venadillo con 2. Las principales causas de los accidentes siguen siendo la manipulación de productos como totes, voladores, volcanes, cohetes y luces de bengala.

"Es una buena noticia que hayamos reducido los casos en comparación con el año pasado, pero debemos seguir alertas. El Tolima ocupa hoy el séptimo puesto a nivel nacional en cuanto a quemados, y no podemos permitir que esta cifra suba más", expresó Katherine Rengifo, secretaria de Salud del Tolima.

Un dato alarmante es que, de los 45 quemados, nueve son niños, lo que representa un doloroso recordatorio de la vulnerabilidad de la población infantil frente a estos artefactos peligrosos. "Este es un llamado urgente a las autoridades municipales para que mantengan el control y sigan tomando decisiones que protejan a nuestros niños y ciudadanos. Todavía tenemos el puente festivo del 6 de Reyes, donde pueden registrarse más casos", agregó la funcionaria.

El sistema de salud del Tolima enfrenta una alta ocupación de quemados, con el 95% de sus camas destinadas a los afectados por este tipo de incidentes. "Necesitamos seguir con todas las alarmas activadas. La seguridad y la salud de los tolimenses deben ser nuestra prioridad", subrayó.

Con un fuerte llamado a la responsabilidad y la conciencia colectiva, el Departamento del Tolima busca seguir reduciendo las cifras de quemados, protegiendo especialmente a los más vulnerables en esta temporada. ¡La salud y la seguridad de todos es responsabilidad de cada uno de nosotros!