Científicos españoles lograron imprimir tejido humano en 3D
En nuestro país, la investigación en materia de biotecnología está muy avanzada. A principios de año pudimos conocer la bioimpresora 3D capaz de fabricar piel humana funcional para su uso en trasplantes a enfermos. Ahora los científicos han conseguido ir un paso más allá logrando imprimir tejidos en 3D que permitirán crear implantes con las células del propio paciente, regenerar tejido en personas con enfermedades óseas como la osteoporosis y evitar los ensayos clínicos con animales.
El proceso, que se ha llevado a cabo con impresoras 3D donadas por BQ, sigue estos pasos: en primer lugar, los investigadores imprimen una cuadrícula de policaprolactona (PCL) en 3D en la que se depositan las células que previamente se han extraído al paciente mediante una aguja añadida al extrusor de la impresora. Después, las células se reproducen en el PCL, formando hueso o cartílago biológico. Una vez formado, el tejido se puede implantar en los pacientes a través de dos vías.
La primera consiste en colocar la cuadrícula con las células del paciente en la fractura del hueso o del cartílago, con el fin de que se regeneren en el interior del cuerpo. La segunda se basa en la creación de un ecosistema en el laboratorio para que las células reconstruyan el tejido, que después se implanta en el enfermo. La ventaja que tiene el uso de los implantes fabricados a partir de las propias células del paciente es que se reduce el riesgo de rechazo.
Además, de acuerdo con la impulsora del proyecto Nieves Cubo, "no hablamos de reemplazar, sino de regenerar. Buscamos cambiar las prótesis artificiales por algo que se integre en el cuerpo". El estudio se encuentra en la fase de desarrollo actualmente y dentro de dos años alcanzará la fase de ensayo clínico, por lo que todavía queda trabajo por hacer antes de que la técnica se pueda emplear en la práctica clínica.