El vicepresidente del sindicato de trabajadores de la salud, Sintrasaludcol en el Tolima, Carlos Díaz, entregó la noticia de la venta de la Clínica Esimed ubicada en la Calle 60 de la ciudad de Ibagué a la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud (FUCS).

El líder sindical señaló que esta noticia ya no era un secreto toda vez que desde el año pasado se venía rumorando la venta de la clínica por parte de la liquidadora Ángela María Echeverry, luego que hubiese hecho el ofrecimiento a diferentes centros asistenciales del Tolima y el resto del país.

Es así como se determinó que Esimed quedó a cargo de la FUCS, en cabeza del doctor Jorge Gómez, quien viene adelantando el trámite y proceso de compra de la misma, sin embargo, esta situación ha generado reacciones entre los trabajadores debido a que inicialmente “fue la venta de Cafesalud, la compró la empresa medimas y entre ellas la operadora que era Esimed”.

Según Carlos Díaz, esta grave situación que se ha vivido con la clínica es desde que “Esimed comenzó a presentar deficiencia del servicio, dejando que las prestaciones se fueran acabando y eso forzó a que la Secretaría de Salud hiciera el cierre preventivo y la investigación”, sin embargo, el mismo sería por dos meses, lo que más de ocho meses después jamás volvió a reabrir.

El análisis entregado por el sindicato de los trabajadores de la salud se hace luego de haber tenido contacto con funcionarios de la Secretaría de Salud el cual les confirmó que una vez se hizo efectivo el cierre, Esimed no presentó ningún recurso, ni cumplió con las exigencias que se habían pactado para iniciar nuevamente su operación y lo que se dio fue el cierre definitivo.

En el caso de las 350 personas que laboraban en la clínica, aseguró Díaz que se encuentran en “un limbo jurídico y problema laboral, porque ellos nos pasaron una carta diciendo que nosotros íbamos hacer nuestras labores desde la casa, carta que criticamos y rechazamos porque somos trabajadores del área asistencial y cómo nos van a mandar a la casa hacer funciones desde allí”.

Según el líder sindical, les informaron que les continuarían pagando normalmente sus salarios, sin embargo, “a la fecha no nos han pagado desde noviembre, ninguna quincena, la prima de diciembre, cesantías, toda la parte legal” y frente a eso no hay ningún pronunciamiento o acercamiento con los trabajadores.

Carlos Díaz dio a conocer que otra situación que tiene en vilo a los trabajadores de la salud es el fallo proferido por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca el cual dio un plazo máximo para trasladar los usuarios de Medimás a otras EPS y llevar a cabo su cierre definitivo, lo que generaría no solo crisis en atención de usuarios sino un problema en el despido masivo de trabajadores a nivel nacional.

Debido a esto se Sintrasaludcol decidió unirse a la actividad nacional denominada “tutelatón”, donde se espera recolectar más de 5 mil tutelas que serán radicadas en Bogotá para no solamente salvaguardar la atención de los usuarios, sino las condiciones laborales de los funcionarios de la EPS.